La única diputada de Podemos en La Rioja, Raquel Romero, consumó el bloqueo a que Concha Andreu, candidata del PSOE a presidir el Gobierno riojano, sea investida. En su discurso de la mañana de ayer en el pleno del debate de investidura ya lo había deslizado, que no votaría a la socialista: “Hoy es un día muy triste para las gentes progresistas de La Rioja”, dijo.
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“Creen que somos la fuerza subalterna del PSOE, se equivocan. Podrán amenazar, mentir, pero el voto de Podemos ni se compra ni se vende”, ha remarcado la parlamentaria morada. “Nunca vamos a vender ni caro ni barato nuestro voto. Nuestro voto se negocia en una mesa transparente, con luz y taquígrafos. Si quieren gobernar, primero que aprendan a negociar. Se han negado a negociar pensando que Unidas Podemos se rendiría y votaría gratis a su candidata”, añadió.
La formación morada exige tres de las ocho consejerías del Ejecutivo autonómico para dar su apoyo a Andreu. El bloque de la izquierda –PSOE, IU y Podemos- ha conseguido en las últimas elecciones regionales del 26 de mayo 17 diputados, frente a los 16 escaños del bloque de la derecha –PP y Ciudadanos-. El parlamento de La Rioja está compuesto por 33 parlamentarios.
Los socialistas lograron 15 representantes. Después de la ruptura de la coalición de Podemos e IU, ambas formaciones cuentan con un asiento cada una. Ambos son necesarios. Henar Moreno, parlamentaria de Izquierda Unida, sí respaldó la candidatura de Andreu, pero sin el apoyo de Romero no se lograba poner fin a 24 años de gobierno del PP en La Rioja.
En la réplica, la candidata socialista reprochó la intervención “tan lamentable y poco constructiva” de la diputada morada. También recordó que “la coalición Unidas Podemos no existe” en esa autonomía al haberse roto después de los comicios.
Asimismo, subrayó que Romero no ha estado presente en las negociaciones que PSOE y Podemos han mantenido en los últimos días. Así, criticó que fuera Mario Herrera, secretario general de la formación morada en Ciudad Real. Fue éste quien exigió tres consejerías en el Ejecutivo autonómico, teniendo solo un escaño. En cambio, los socialistas ofrecieron “direcciones generales”, propuesta que el partido de Pablo Iglesias rechazó de plano.
Así las cosas, hubo empate que aboca a una nueva sesión de investidura mañana. Si para entonces las posiciones no se mueven, se repetirá el empate. De ser así, el bloqueo se habrá culminado y comenzará un plazo de dos meses para investir a un o una presidente en La Rioja. Finalmente, si permanece el bloqueo, la Asamblea regional quedará disuelta a mediados de septiembre y se convocarán nuevos comicios autonómicos.