Polémicas declaraciones, en una entrevista a Europa Press, de Renzo Fratini, nuncio apostólico en España, al decir que lo que ha conseguido el Gobierno con el proyecto de exhumación de los restos de Franco es “resucitar” al dictador.
“Sinceramente, hay tantos problemas en el mundo y en España. ¿Por qué resucitarlo? Yo digo que han resucitado a Franco. Dejarlo en paz era mejor, la mayoría la gente, de los políticos, tiene esta idea porque han pasado 40 años de la muerte, ha hecho lo que ha hecho, Dios juzgará. No ayuda a vivir mejor recordar algo que ha provocado una Guerra Civil”, señaló.
Fratini lleva diez años como representante del Papa en España y hoy se retira del cargo para marchar a Italia después de haber cumplido 75 años. Durante este tiempo ha mediado en asuntos problemáticos que afectan a la Iglesia. Uno de ellos es la exhumación de los restos de Francisco Franco, un tema que deberá retomar su sucesor. Por el momento, será Michael Francis Crotty, primer consejero de la nunciatura, quien se ponga al frente de esta puesto que el Vaticano aún no ha dado a conocer el nombre del sustituto, después de haber tardado dos meses en aceptar la renuncia de Fratini.
Desde que Pedro Sánchez anunciara la intención del Ejecutivo de exhumar los restos del dictador, el nuncio ha tratado de mediar puesto que la tumba de Franco está en la abadía del Valle de los Caídos. “La Santa Sede ha tenido una posición neutral, es un problema más de la familia Franco y del Gobierno”, matizó. En su opinión, detrás del proyecto hay “motivos, sobre todo políticos” e “ideológicos”: “Está detrás una ideología de algunos que quieren de nuevo dividir a España”, remarcó. Cree que sea la pretensión era dejar de enaltecer la figura de Franco, se ha logrado lo contrario.
“Se ha enaltecido mucho más después de que se anunciara esto porque las visitas han aumentado, el problema ha regresado, mucha gente no sabía dónde estaba el Valle de los Caídos”, señaló. Con todo, si bien el Vaticano “no se opone”, “hay que respetar el derecho de la familia”. Sin embargo, si finalmente se lleva a cabo la exhumación –cabe recordar que el tribunal supremo la ha parado cautelarmente-, Fratini no se posiciona “en contra de la eventual decisión del Gobierno” de trasladar los restos al cementerio de El Pardo, eso sí, “en el respeto siempre de los derechos y de la voluntad de los familiares”.
A ese respecto, indicó que “la catedral de La Almudena sería peor, en el sentido de que el motivo era evitar el enaltecimiento, que la gente vaya allí”. Con todo, pide “olvidar el mal”, ya que es “si no, regresa la pelea, la Guerra Civil”. Terminó diciendo que “a franco algunos lo llaman dictador, algunos dicen que ha liberado España de una Guerra Civil, que ha solucionado un problema. No continuemos peleándonos sobre si tenía razón o culpa”.
El Gobierno enviará una queja formal a la Santa Sede, según ha anunciado Carmen Calvo, vicepresidente del Ejecutivo en funciones, por lo que considera una “injerencia” en los asuntos internos de un Estado.