Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, acusa a Pedro Sánchez, jefe del Ejecutivo en funciones, de mentirle porque le dijo “que haríamos un Gobierno de coalición y le traslade a mi equipo que su palabra era sincera. Fue un error”.
Así se manifestó el líder morado en Espejo Público en la que señaló que, cuando el presidente dijo en una entrevista en laSexta que le quitaría el sueño un Gobierno en el que estuviera Unidas Podemos, “faltó al respeto a mucha gente que tiene dificultades para llegar a fin de mes”. Iglesias recomendó a Sánchez que, si no donde bien, “puede cambiar el colchón todas las veces que quiera”.
A su juicio, la propuesta que los socialistas hicieron en julio con una vicepresidencia y tres ministerios “no fue sincera”. Llega a esa conclusión después de escuchar a Sánchez en entrevista con Antonio García Ferreras de la que, en su opinión, se deduce que “nunca deseo un gobierno de coalición”.
Además, si hubiera sido real, dijo, no habría caducado las 24 horas. Reiteró que “no es serio” que una negociación de Gobierno se cierre en dos días.
Iglesias se mostró decepcionado: “Me arrepiento de creer en la palabra de Pedro, me mintió, me dijo que haríamos un Gobierno de coalición. No sé si me robó la cartera, pero no me dijo la verdad y yo confié en él”, manifestó.
Fue ahí cuando el líder morado dijo que Sánchez “es el problema” y que propició el bloqueo institucional y no Podemos o Ciudadanos, como el presidente apunta. Puso el ejemplo de que los partidos nuevos no bloquearon los gobiernos en varias comunidades autónomas, donde Unidas Podemos y PSOE gobiernan en coalición.
Aseguró que “el hecho diferencial es que Pedro Sánchez quiere todo el poder para dormir bien, pero para eso debe tener mayoría absoluta”. Entonces, se pregunta que lo hace distinto al presidente de otros candidatos.
Así, quiso echar una mirada a lo sucedido en Italia, donde el Partido Democrático, socialdemócrata como el PSOE, gobierna en coalición con el Movimiento 5 Estrellas a pesar de las diferencias tan importantes entre ellos.
Concluye que detrás de la negativa de Sánchez están los poderes económicos, la CEOE y la presidente del Santander.