Denuncian la presión ejercida por Estados Unidos a nivel internacional.
Pasado un día de la reunión en Sochi entre Mike Pompeo, secretario de Estado de Estados Unidos, y Sergei Lavrov, ministro de Exteriores ruso, Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, ha afirmado que por parte de Washington no se planteó en ningún momento del encuentro “ninguna garantía” en relación a Irán.
“Existe una situación evidente, la cual, por desgracia, tiene una tendencia a seguir empeorando”, ha asegurado Peskov, horas después de que se hiciese pública la confirmación de Irán a renunciar a partes de los compromisos firmados, según ha trasladado la agencia de noticias Sputnik.
Por su parte, el portavoz de la Presidencia de Rusia ha apuntado “observar con pena” que el Gobierno iraní tome esas decisiones ya que “se ve obligada a dar esos pasos no por iniciativa propia, sino en respuesta a una presión”. El Kremlin hace responsable a Washington ya que durante este pasado año ha presionado a otros países con el fin de evitar que mantengan relaciones políticas o económicas con Irán.