Ejercitar la zona pélvica disminuye problemas de próstata, eyaculación precoz o erección.
Según National Institutes of Health, en Estados Unidos, la mitad de la población masculina a partir de los 50 años podrá tener algún problema relacionado con la próstata. Si se fortalece el suelo pélvico a través de ejercicios puede traer beneficios en el caso de problemas de incontinencia, próstata o disfunciones sexuales.
El área pélvica de los hombres, de igual modo que ocurre en la mujer, es la pared de músculo y membrana que sostiene la vejiga y la próstata. En esta zona se abren espacios a otros conductos. Es el caso de la uretra y el recto, en los hombres. Si esa zona no se ejercita, el riesgo de próstata va en aumento a partir de los 30 años, empezando a debilitarse, trayendo consigo incontinencia urinaria y problemas de erección, anorgasmia o eyaculación precoz, según se recoge en Quo.
Un modo de aumentar el tiempo de eyaculación alrededor de 31 segundos hasta 246 es la realización de ejercicios de Kegel. Esta afirmación viene recogida en un estudio realizado en la Universidad Sapienza de Roma publicado en Therapeutic Advances in Urology, mediante la realización de esos ejercicios durante doce semanas. El trastorno sexual más común es la eyaculación precoz y produce un gran impacto en la calidad de vida de quien la padece. La técnica estudiada en la Universidad Sapienza ha llevado a sus autores a plantearla como una opción terapéutica viable y de coste reducido.
El objetivo de ese método de rehabilitación es conseguir una contracción muscular con el que el paciente pueda ser consciente de la actividad motora; electroestimulación del suelo perineal que estimule el nervio pudendo y logre que el esfínter uretral se contraiga; el control de las contracciones musculares del suelo perineal y el esfínter genitourinario. Todo ello mediante tres sesiones de 60 minutos a la semana, aplicando las tres técnicas durante veinte minutos cada una de ellas.
La sexóloga española Nayara Malnero traslada su propuesta que es realizar ejercicios simples que fortalezcan los músculos implicados. Cualquier lugar es apropiado para realizarlos puesto que pasan inadvertidos. El primero de ellos es realizar contracciones en estos músculos cuatro veces al día en grupos de 20. En el caso de la mujer, los embarazos, los partos, el sobrepeso y la edad hacen que el suelo pélvico se debilite. En el caso de los hombres, los principales riesgos son el sobrepeso, la edad, la tos crónica, el estreñimiento, las cirugías abdominales y cargar peso frecuentemente.