Intervenir y reformar el mercado eléctrico en Europa es la apuesta de Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea. Es decir, lo que España lleva reclamando un año.
Así lo ha defendido en una intervención en la cumbre Estratégica del Bled, en Eslovenia, donde ha pedido acabar con la dependencia energética.
Indicó que el mercado eléctrico en la Unión Europea se diseñó “para otras circunstancias”. Ahora es el responsable de los precios “desorbitados” en el continente algo que se ha agravado por la guerra en Ucrania. Esto se debe a que se vincula el precio del gas al de otras energías.
Con la intención de cortar toda dependencia energética con Rusia, Von der Leyen ha puesto sobre la mesa una mayor defensa de la democracia.
También, como respuesta de Europa a la invasión de Ucrania.
Así, reiteró que los “precios desorbitados” ponen de manifiesto las “limitaciones en” del diseño del mercado eléctrico actual.
Según indicó, se desarrolló “para diferentes circunstancias. Por eso ahora estamos trabajando en una intervención de emergencia y una reforma estructural del mercado eléctrico”.
A ese respecto, la política alemana pide una respuesta europea al “chantaje” energético de Moscú en plena escalada de precios de la energía.
Además, de ahí se desprenden las primeras dudas acerca de la unidad europea sobre las sanciones que se han impuesto al petróleo ruso.
“La era de los combustibles fósiles rusos en Europa se ha acabado. Liberarnos del chantaje nos traerá más poder para defender el orden global”, ha sostenido.
Así las cosas, la jefa del Ejecutivo comunitario destacó que los Veintisiete trabajan para cortar esos vínculos con la energía rusa.
“A la velocidad de la luz”, la UE está diversificando los proveedores de hidrocarburos. Asimismo, aprovechó para recordar que, en lo que llevamos de año, ha aumentado en 31.000 millones de metros cúbicos la importación de gas. Eso sí, desde otros países distintos a Rusia.
Por otra parte, ha remarcado los planes para rebajar la demanda de gas en el bloque comunitario. También, para mejorar la capacidad de ahorro y aumentar las reservas del bloque comunitario.
El objetivo no es otro que Europa “esté preparada para una potencial alteración del gas ruso”.
Con todo, hizo hincapié en que el mejor modo para acabar con esa dependencia es acelerar la transición verde y potenciar las energías renovables.
“Cada kilovatio de electricidad que Europa genera de energía solar, eólica, hidráulica, biomasa, geotérmica o de hidrógeno verde nos hace menos dependientes del gas ruso”, insistió.
Precisamente, este lunes se ha conocido que los ministros de Energía de los Veintisiete se reunirán en un cónclave extraordinario el próximo 9 de setiembre.
En el orden del día, debatir medidas para “arreglar el mercado de la energía”.