La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha actualizado los datos del número de casos de viruela del mono en países no endémicos.
Así, hasta el 8 de junio se han notificado 1.285 casos confirmados por laboratorio y un caso probable de 28 países donde la enfermedad no es endémica.
Supone un incremento de 505 casos confirmados respecto al informe anterior, que cubría hasta el 3 de junio, informando de 780.
En cualquiera de los casos, no se ha notificado muerte alguna en estos países de cuatro Regiones de la OMS.
La mayoría de los casos de viruela del mono registrados en esos 28 países corresponden a la Región Europea. En concreto el 87%, es decir, 1.112.
Asimismo, 153 corresponden a la Región de las Américas, 14 de la Región del Mediterráneo Oriental y 6 a la Región del Pacífico Occidental.
Así, el recuento de casos, del que se dispone a diario, fluctúa constantemente, a medida que se reportan. Además, se verifican según el Reglamento Sanitario Internacional (RSI 2005).
A su vez, las muestras clínicas de los casos de viruela del mono asociados a este brote son variables. En muchos de ellos, la clínica es la habitual para esta enfermedad
Es decir, fiebre, ganglios linfáticos inflamados, seguido de erupción cutánea concentrada en la cara y las extremidades.
Sin embargo, también se están mostrando otras clínicas no habituales, como una sola lesión o lesiones que comienzan en el área genital o perineal. En cambio, no se extienden a otras zonas del organismo.
Respecto a la transmisión, se sabe que se necesita contacto físico para ella, bien con las propias lesiones, bien con fluidos corporales sexuales.
De hecho, la aparición repentina de la viruela del mono a la vez en varias regiones sin enlaces directos sugiere que hubo transmisión no controlada durante semanas.
Así, la situación evoluciona, mientras la OMS espera que se vayan detectando más casos gracias a la mayor vigilancia en los países.
Por ahora, la agencia de la ONU cataloga el riesgo a nivel global como moderado.