Unicef teme por la vida de más de 700.000 niños rohingya

Pide protección para ellos ante la llegada de la temporada de tifones a Bangladesh, la violencia y la violación de sus derechos fundamentales.
Según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, Unicef, son ya casi un millón de refugiados rohingya en Bangladesh después de la última migración en masa desde el estado birmano de Rajine, en que huyeron casi 700.000 personas. Ahora, ante la llegada de la temporada de tifones y la violencia y violación de los derechos fundamentales de estos refugiados, Unicef reclama protección para ellos. Según Manuel Fontaine, director de los programas de emergencias de esta organización, “alrededor de 720.000 niños rohingya están atrapados” en una especie de limbo y sin apenas derechos. Si se inundarán los campos de refugiados, el riesgo de enfermedades transmitidas a través del agua aumentaría y las clínicas se verían obligadas a cerrar, al igual que centros de aprendizaje y otras instalaciones para los niños, avisa en un informe Unicef. Belén de Vicente, jefa de prensa del Comité Español de Unicef, advierte que en Kutu Palong, el campo de refugiados considerado como el más grande del mundo, que visitó recientemente, “viven hacinados en pequeñas chozas con unas condiciones de vida absolutamente precarias”.
Fontaine afirma que “esta no es una crisis que se solucione fácilmente, podría llevar años superarla si no se coordinan esfuerzos para abordar las causas subyacentes que la han motivado”, a la vez que pide al Gobierno birmano que respete los Derechos Humanos, eliminando la restricción de movimientos para los rohingya y permitiendo que accedan a servicios básicos y medios de subsistencia. “No van a volver a no ser que se garantice su seguridad y se les conceda la nacionalidad, a menos que pueda mandar a sus hijos al colegio y vean la oportunidad de un futuro”. Y es que, advierte De Vicente, persiste el recuerdo en muchos de ellos de la barbarie cometida por los militares birmanos. Los rohingya son un pueblo sin patria de religión musulmana en un país, Birmania, de mayoría budista.