Llega a atacar a Rod Rosenstein, fiscal general adjunto de Estados Unidos.
A través de una serie de mensajes en Twitter, Donald Trump, presidente estadounidense, vuelve a poner en duda que no sea una conspiración la investigación federal acerca de sus relaciones con Rusia e, incluso, llega a lanzar ataques contra Rod Rosenstein, fiscal general adjunto.
Lo hace al poco de que se hayan rebelado nuevos detalles de esta investigación, como que Paul Manafort, ex jefe de campaña del mandatario norteamericano, mintió en su confesión con el fin de evitar la cárcel. Este viernes, James Comey, ex director del FBI, declaró ante la Cámara de Representantes acerca de su tortuosa relación con Trump. Testificó a puerta cerrada pero su testimonio será publicado en breve.
“Robert Mueller y ese embustero de James Comey, son los mejores amigos que hay. Uno de los muchos conflictos de interés que hay aquí. ¿Acaso Rod no está en conflicto por escribir precisamente informes sobre Comey?”, reza uno de los tweets.
Además, según fuentes cercanas han informado de que John Kelly, jefe de Gabinete del presidente, dimitirá en los próximos días. Al parecer, “su relación ha llegado esencialmente a un punto muerto” y resulta “insostenible por ambas partes, hasta el punto de que llevan días sin hablarse”, aseguran dichas fuentes.
Ya en verano se especuló con esta dimisión, cuando Kelly tuvo que desmentir que había llamado “idiota” al magnate después de una reunión tensa acerca de inmigración. Antes que él, Reince Priebus antiguo presidente del Comité Nacional Republicano, fue sustituido por el actual jefe de Gabinete por la ruptura de relaciones entre Trump y Priebus, lo que se interpretó como un desaire hacia el extremo republicano de su Gobierno.