A los pies del monte Fuji en Japón es donde Toyota planea construir la ciudad del futuro, un ecosistema cuya energía saldrá de pilas de combustible de hidrógeno. Alrededor de 70 hectáreas albergarán ese “laboratorio vivo”, como la han bautizado, y donde los investigadores podrán probar tecnologías y desarrollarlas.
Es el caso de la robótica, la movilidad personal, los hogares inteligentes o la inteligencia artificial, pero en un entorno real. Nos lo cuenta mundo.sputniknews.com.
Aiko Toyoda, CEO de Toyota Motor Corporation, ha señalado que “construir una ciudad completa desde los cimientos, incluso a pequeña escala como esta, es una oportunidad única para desarrollar tecnologías futuras”. Eso incluye “un sistema operativo digital para la infraestructura urbana”. Es la futura Woven City (Ciudad Tejida).
Bjarke Ingels, arquitecto danés a quien se invitó a diseñar esta urbe, ha dicho que “un enjambre de tecnologías diferentes está empezando a cambiar radicalmente la forma en que habitamos y navegamos por nuestras urbes”.
“Las soluciones de movilidad conectadas, autónomas, sin emisiones y compartidas están destinadas a desencadenar un mundo de oportunidades para nuevas formas de vida urbana”, añadió.
Habrá tres tipos de calles, según el plan marco. Una, solo para vehículos rápidos; otra, para vehículos de menor velocidad y peatones; y una tercera, para pasear, a modo de parque, solo para peatones. En las vías principales, los vehículos serán totalmente autónomos y de cero emisiones.
Una ciudad del futuro totalmente sostenible
En esa misma línea, el diseño de la ciudad pretende que sea totalmente sostenible. Los edificios se construirán en su mayoría con madera, a fin de minimizar la huella de carbono. Se empleará la carpintería tradicional japonesa, pero se combinarán métodos de producción con robots.
Asimismo, los tejados estarán cubiertos con paneles fotovoltaicos para aprovechar la energía solar, unida a la generada por pilas de combustible de hidrógeno. La ciudad se alimentará también con el aire libre de vegetación autóctona e hidropónica.
Lo último en tecnologías de apoyo humano estará presente en las residencias. Entre ellas, la robótica en el hogar con el fin de ayudar en la vida diaria.
Existirá un gran parque central, además de parques en cada vecindario y una plaza central para albergar reuniones sociales que unan a la comunidad. Para Toyota, el fomento de la conexión humana será un elemento importante en esta experiencia.
Sus habitantes serán los propios empleados y sus familias de la compañía nipona. También parejas jubiladas, comerciantes, científicos visitantes y socios de la industria. En un principio serán cerca de 2.000 personas, aunque la población aumentará a medida que evolucione el proyecto. Su construcción dará comienzo a principios de 2021.
Sin duda una gran noticia para la sociedad y para una isla con tantos problemas de población como es Japón. Ojalá sea un éxito y sirva de ejemplo para futuras urbes.