Una sinagoga en la localidad de Halle, al este de Alemania, ha sido el escenario de un tiroteo del han resultado muertas dos personas. Posteriormente, hubo disparos en Landberg, a unos 15 kilómetros de Halle, según informó una portavoz policial, que no aportó más detalles.
La Policía ha señalado la detención de una persona, si bien en un principio había advertido de que los presuntos autores de los disparos en la primera localidad alemana habían escapado en un vehículo. “Nos mantenemos en alerta”, matizó.
Según han relatado algunos testigos, uno de los atacantes portaba equipación de combate y una pistola automática. Otros han dicho que se había producido una explosión en el cementerio.
Se especula con un posible móvil de extrema derecha al coincidir el tiroteo con la celebración del Yom Kippur, la festividad por antonomasia del judaísmo.
Según declaraciones de un portavoz policial a Der Spiegel, una de las dos víctima, un hombre, ha fallecido en un establecimiento de kebab cercano a la sinagoga. La otra víctima, una mujer, ha muerto en una calle cercana al cementerio.
Max Privorotzki, presidente de la Comunidad Judía de Halle, ha señalado que los atacantes intentaron entrar en la sinagoga, en la que en ese momento habría entre 70 y 80 personas, pero que “han impedido el ataque” en el interior las medidas de seguridad.
Además, la empresa de ferrocarriles Deutsche Bahn indicó que la estación central de la localidad ha quedado cerrada a causa de la investigación policial. Los trenes de origen o destino a la misma fueron retrasados.