Donald Trump, expresidente de Estados Unidos, sigue intentando que los informes de la Casa Blanca sobre el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 queden en manos del Congreso estadounidense.
De hecho, ha interpuesto varios recursos para impedirlo. La última vez, ante el Tribunal Supremo de Estados Unidos, que este miércoles rechazó su solicitud.
Así, el alto tribunal ha remarcado que “no hay precedentes” acerca de que un expresidente apele para bloquear la publicación de registros. Señala que no se ha abordado este asunto ya que los tribunales inferiores “analizaron y rechazaron” las pretensiones de Trump.
El ex mandatario ha tratado de invocar el ‘privilegio ejecutivo’ sobre todos los documentos, incluidos los informes de la Casa Blanca. Defiende que deben mantenerse en secreto “a perpetuidad”. En cualquier caso, exige que le dejen revisar antes los registros.
Sin embargo, el Supremo subraya en un breve comunicado sin firmar que su intento de bloqueo “habría fracasado, incluso si él fuera” el presidente.
Sólo uno de los magistrados del alto tribunal estadounidense, Clarence Thomas, se ha mostrado públicamente a favor de conceder la solicitud a Trump. Curiosamente, lo nombró George W. Bush.
Los informes de la Casa Blanca irán al Congreso
En consecuencia, las más de 700 páginas de los registros de la sede del Ejecutivo deberán entregarse al comité investigador del Congreso.
Estos informes de la Casa Blanca incluyen registro de actividades, notas de discursos, horarios y tres páginas de notas manuscritas por Mark Meadows. Éste era el jefe de gabinete del expresidente.
Resulta importante porque podría desvelar lo que ocurrió en el ala oeste cuando los partidarios de Trump se iban congregando antes de asaltar el Capitolio.
Así, Joe Biden, actual presidente estadounidense, dio su autorización a los Archivos Nacionales para que entreguen la documentación. Negaba, por tanto, aplicar el ‘privilegio ejecutivo’.
Y es que varios tribunales federales desestimaron la petición de Trump porque “no estaba justificada”. Luego, recurrió a la corte de apelaciones del distrito de Columbia.
Ésta consideró que el ex mandatario gozaba de cierta autoridad, aunque no suficiente para contradecir la decisión de Biden. En consecuencia, su última opción era un recurso ante el Supremo, que ahora rechaza su solicitud.
El crimen no compensa; la justicia es lenta, pero cuando llega puede ser demoledora. Sujetos como Trump y Bolsonaro son un peligro para la humanidad.