El déficit de la Seguridad Social cerrará este año en el 4,1% del PIB, una cifra que equivale a más de 45.000 millones de euros. Para 2021, si las previsiones no fallan, el mismo déficit podría suavizarse hasta el 3%. Este déficit se arrastra desde 2011.
Todo apunta a un único culpable: la pandemia de coronavirus que mantiene el país y que, de momento, no le permite levantar cabeza. Un gran volumen de gastos frente unos ingresos mínimos.
Sin ir más lejos, en el primer semestre, la recaudación descendió un 3,8%, frente a un 3% de gastos, según datos aportados por el BBVA.
Para intentar salvar los muebles, el Gobierno ha proyectado un plan con el que recomponer las cuentas. El Ejecutivo de Pedro Sánchez, contempla unas previsiones de recaudación fiscal de 9.170 millones de euros para 2021 y 2022.
Según lo previsto, esto se conseguiría aumentando el IVA de las bebidas azucaradas, del 10 al 21 por ciento y a través de las tasas ‘Google’ y ‘Tobin’. Otros 2.548 millones de impuestos directos. También, la modificación del IRPF para gravar a las rentas más altas.
Asimismo, se contempla incrementar el tipo mínimo del Impuesto de Sociedades y otros impuestos directos que se podrían modificar. Son, los de Sucesiones y Donaciones, o el de Patrimonio.
José Luis Escrivá, ministro de Seguridad Social, también baraja la posibilidad de suprimir algunas deducciones fiscales que, ahora, se aplican a los planes de pensiones.
El propio Escrivá matizó hace pocas fechas la “singularidad” de España. “Es el país europeo con mas exenciones fiscales”, lo que conlleva que las administraciones públicas renuncien a ingresos.
De hecho, a principios de año, el mismo ministro ya anunciaba su intención de quitar las desgravaciones en la base imponible del IRPF para los planes de pensiones individuales de hasta 8.000 euros al año. Si eso se llevara a efecto finalmente, supondría un recaudación extra de 2.000 millones.
Aun así, el Gobierno mantiene su intención de revalorizar las pensiones para 2021 un 0,9%. Con esta subida, sería el cuarto año consecutivo que las pensiones se revalorizan por encima del mínimo legal del 0,25 por ciento.