Autorizada por parte de la Sala Segunda del Tribunal Supremo de Brasil, la extradición de Carlos García Juliá, uno de los autores de los asesinatos de los abogados de Atocha en 1977. Fue detenido en Sao Paulo en diciembre de 2018 después de más de veinte años en busca y captura.
La decisión del Supremo ha sido tomada por unanimidad, bajo el criterio de la Fiscalía General brasileña. García Juliá fue condenado a 193 años de cárcel por parte de la Audiencia Nacional.
Los magistrados han asegurado que la petición de extradición por parte del Ejecutivo de España recoge los requisitos de doble tipicidad y doble castigo, además de que la causa se considera delitos comunes y no crímenes políticos.
Raquel Dodge, fiscal general, ha considerado que la solicitud de extradición recoge los hechos de forma adecuada y no fue presentada «con el propósito de hostigar o castigar al extraditado por sus opiniones políticas».
García Juliá, perteneciente al grupo de terroristas de extrema derecha que asesinaron a los abogados de Comisiones Obreras del despacho de la calle Atocha en Madrid, fue condenado como autor de cinco asesinatos, además de por otros tres asesinatos frustrados y tenencia de armas.
Fue detenido en marzo de 1977, y después juzgado y condenado. Le fue concedida la libertad condicional en 1991 y en 1994 pidió autorización judicial para salir de España. Desde entonces se ha mantenido oculto en países como Argentina, Chile, Venezuela y Brasil, donde fue detenido en diciembre.
Se extradita a España a uno de los autores de la matanza de Atocha.
