Se ha confirmado la muerte de al menos diez personas a causa de un brote.
Según un último informe de la Organización Mundial de la Salud, OMS, al menos diez personas han fallecido afectadas por un brote de fiebre amarilla en Etiopía y confirman el envío de 1,5 millones de vacunas para afrontar la emergencia.
Este nuevo brote se ha localizado en la zona de Wolayta, en la región de Naciones, Nacionalidades y Pueblos del Sur, al suroeste del país. Hay un total de 35 casos confirmados, residentes todos ellos en Offa Woreda. No ha habido nuevos casos en la última semana.
Se ha aprobado el envío de 1.450.000 vacunas del almacén de emergencia para unca, “campaña masiva de vacunación reactiva”, para vacunar a en torno a 1.340.000 personas en nueve distritos de Gamo Gofa y Wolayta.
La OMS ha mostrado su preocupación por este bote, “debido a que la población de Etiopía es altamente susceptible a la fiebre amarilla debido a una exposición reciente y a la falta de inmunizaciones a gran escala”. “Los movimientos de población y cabezas de ganado debido a los conflictos en la región suponen un riesgo para una mayor expansión de la enfermedad”, señalan.
Además, remarcan, “si bien se llevó a cabo rápidamente una campaña reactiva de vacunación en la zona afectada, existe la necesidad de incrementar la respuesta a otras zonas en riesgo, así como adoptar medidas de control a largo plazo”.