Este domingo, el PSOE ha presentado dos recursos ante el Tribunal Constitucional (TC) para intentar que admita a trámite el que presentó el PP.
Un recurso de amparo que pretende que las Cortes Generales no puedan votar las enmiendas que afectan al propio TC.
Unas propuestas del Gobierno que tratan de desbloquear la renovación de cuatro de los magistrados del tribunal de garantías.
Así, según argumentan los socialistas en un escrito, frenar la reforma del sistema de elección de los jueces ‘caducados’ vulnera derechos de los ciudadanos.
El PSOE sostiene que, de admitir la solicitud de los populares, el Constitucional “vulneraría el derecho de la ciudadanía a participar en los asuntos públicos a través de sus representantes”.
Asimismo, “perturbaría” el funcionamiento de las Cortes Generales.
Además, alegan, interponer recursos de amparo sin agotar las vías internas es causa de inadmisión a trámite con carácter previo. “Como tiene determinado” el propio tribunal, apostillan.
Por tanto, apuntan, admitir la medida cautelarísima que pide el PP “implicaría que el Tribunal Constitucional vía interpretativa, interfiriera en la competencia del legislador”.
De otra parte, en otro escrito, los socialistas solicitan que se aparte a los magistrados Pedro González-Trevijano y Antonio Narváez.
De este modo, se adhieren a la recusación que formuló Unidas Podemos. Alegan que los designó el Gobierno de Mariano Rajoy y, en consecuencia, podrían tener “interés directo o indirecto en el pleito o causa”.
En ese sentido, señalan que “la composición de la Sala o Pleno del órgano debe ser tal que no deba permitir albergar la más mínima duda respecto a la imparcialidad de quienes lo integran”. Así es “en todo proceso judicial”.