La economía de Estados Unidos ha entrado en recesión técnica después de que su PIB se contrajera un 0,2% en el segundo trimestre.
Asimismo, tras la contracción de su Producto Interior Bruto en un 0,4% en los tres primeros meses del año.
Así se desprende de la primera estimación del dato publicada este jueves por la Oficina de Análisis Económico del Gobierno estadounidense (BEA).
Según el consenso de los economistas, se habla de recesión técnica cuando la economía de un país se contrae dos trimestres consecutivos.
Por su lado, la BEA ha señalado que entre abril y junio de 2022 se registraron caídas de la inversión privada en inventarios. También, en inversión fija no residencial.
Con todo, estos descensos se compensaron en parte con el alza en las exportaciones y el gasto de los consumidores.
Asimismo, la Oficina de Análisis Económico del Gobierno estadounidense indica que la contracción económica se produjo en un escenario de “continua inflación”. Igualmente, por el bajo desempleo, subidas de tipos de interés y los persistentes problemas en las cadenas de suministros.
Así las cosas, el PIB de Estados Unidos cerró el segundo trimestre con un PIB del 2,5%. Un dato por encima del que se registró al término del cuarto trimestre de 2019, antes de cualquier impacto económico de la pandemia. De hecho, el primer trimestre cerró un 2,7% por encima.
Hablando en términos estrictamente anuales, los preferidos por la BEA para presentar estos datos, el PIB estadounidense se contrajo un 0,9% al cerrar junio. El primer trimestre terminó con una caída del 1,6%.