Varios rebrotes en diversas localidades oscenses han hecho que las comarcas de Cinca Medio, Bajo Cinca y La Litera retrocedan a fase 2 de desescalada. Entre esas localidades se encuentran Binéfar, Zaidín, Fraga y Monzón.
Sira Repollés, consejera de Sanidad de Aragón, Francisco Javier Falo, director general de Salud Pública del Gobierno aragonés, y Javier Marión, gerente de Salud de Aragón, lo anunciaban en rueda de prensa ayer. Se ha emitido una orden en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) en colaboración con el Ministerio de Sanidad.
Al volver a la fase 2, los aforos en el interior de hostelería se reducen al 50% y sin el acceso a barra. En las piscinas, el aforo queda limitado a un tercio. Se extreman también las medidas de distanciamiento social.
Desde el Ejecutivo aragonés han aconsejado que se limiten los desplazamientos desde y hacia estas zonas de ocio. Eso sí, dejan claro que sólo es “una recomendación”, puesto que el Gobierno regional no tiene capacidad de limitar la movilidad.
Repollés, no obstante, aseguró que “si las condiciones epidemiológicas exigieran que tuviésemos que tomar medidas más drásticas en el sentido de limitar la movilidad, nos dirigiríamos al Estado, que arbitraría las medidas oportunas para poder exigir esa limitación”.
Una empresa hortofrutícola de la comarca del Bajo Cinca tuvo que suspender su actividad tras un decreto de Salud Pública. Allí se había registrado rebrotes, ocho casos de un total de 178 pruebas PCR y Elisa a los trabajadores de la compañía. La prueba Elisa se emplea para detectar anticuerpos.
Los afectados por los rebrotes residen en las tres comarcas oscenses
Las personas contagiadas residen, además de en Bajo Cinca, también en La Litera y Cinca Medio. Después de aislar a los contagiados, continúa el estudio de contactos.
La consejera de Sanidad ha señalado que el paso a la normalidad se ha realizado “según lo previsto. Los pasos de las diferentes fases se han producido porque, a juicio de la Consejería y del Ministerio, se observó que la comunidad “ha evolucionado de forma favorable”. Así, la incidencia se redujo y la capacidad de detección y atención se reforzó.
Con todo, según ha explicado, la situación de la epidemia es “dinámica” y eso ha hecho que la “situación epidemiológica haya cambiado rápidamente los últimos días”.
Tal es así que mientras que el 18 de junio solo se comunicaban dos casos en Huesca, al día siguiente se notificaban 19 en la provincia. El sábado pasado fueron diez y el domingo, 25.