Este viernes, Vladimir Putin, presidente de Rusia, ha proclamado la anexión a la Federación Rusa de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia.
Son, precisamente, aquellas en las que se celebraron entre 23 y el 27 de setiembre referendos ilegales organizados por Rusia y sin seguridad jurídica alguna.
Pese del aviso de la comunidad internacional y la ONU de que no reconocerían la anexión, Putin lo ha llevado a cabo en el Kremlin.
De hecho, ni siquiera la integridad territorial de Jersón y Zaporiyia están bajo control ruso.
Así, en un solemne acto culmina una nueva fase en la ofensiva soberanista sobre Ucrania.
Lo hizo en presencia de las principales autoridades del país y de los líderes prorrusos de las cuatro regiones ucranianas.
“Serán ciudadanos rusos para siempre”, proclamó. Además, calcó paso a paso la escenificación de la anexión de Crimea en 2014.
Asimismo, sostuvo, como hizo entonces, que respondía al deseo de “millones de ciudadanos”. Están, dijo, en su “derecho” de pedir unirse a Rusia en virtud del principio de autodeterminación de los pueblos que contempla la propia ONU.
Tras recordar a los “mártires” que perdieron la vida “víctimas del régimen de Kiev”, aprovechó para emplazar a Ucrania a aceptar un alto el fuego.
Eso sí, dando por hecho que las cinco regiones que cree que pertenecen a Rusia quedarán bajo el poder ruso. Un mensaje dirigido tanto a Kiev como a Occidente.
Así, tras cargar contra los países occidentales, alertó de que los compromisos de la expansión de la alianza atlántica resultaron ser un “engaño”.
Putin muestra las anexiones como un triunfo
Acostumbrado a un cinismo que maneja con destreza, Putin presentó estás anexiones como un triunfo calculado.
No mencionó, en cambio, los reveses que el Ejército ruso viene encajando desde hace un mes por la contraofensiva de las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Tampoco mencionó las explosiones que provocaron fugas de gas en el Nord Stream 1, ni el ataque con misiles a un convoy humanitario este viernes.
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Precisamente, la recuperación de numerosas ciudades por parte de las tropas ucranianas ha dejado al descubierto nuevos crímenes de guerra rusos.
Ignorando estos ‘detalles’, el también ex agente del KGB cargó contra Estados Unidos. “Es el único país del mundo que usó dos veces armas nucleares”, en alusión a Hiroshima y Nagasaki.
Así las cosas, a ojos de Moscú las cuatro regiones anexionadas son territorio ruso.
En ese sentido, Dimitri Peskov, portavoz del Kremlin, aseguró este viernes que cualquier ataque contra estas regiones se considerará “una agresión” contra Rusia. Otro cinismo.