El Ejecutivo sólo muestra disposición de dialogar con ERC en pro del apoyo republicano en el Congreso, aseguró Carles Puigdemont en una rueda de prensa.
“Parece que el Gobierno tenga sólo interés en negociar con una parte del independentismo, que es casualmente la que le da estabilidad parlamentaria”, dijo sin mencionar expresamente a ERC.
Tras su detención el jueves y posterior puesta en libertad sin medidas cautelares, el expresident se dirigió a L’Alguer. Lo acompañó su abogado, Gonzalo Boye, Josep Lluís Alay, jefe de su Oficina, y Mario Conoci, síndico de ese municipio.
Antes se había reunido con Pere Aragonès, presidente de la Generalitat, y Jordi Puigneró, el vicepresidente.
Así, Puigdemont manifestó su escepticismo sobre la mesa de diálogo que se reunión el pasado 15 de setiembre. En ella no estuvieron presentes miembros de Junts ya que Aragonès no aprobó la lista que presentaron los neoconvergentes, dejándolos fuera.
El actual president no permitió que miembros de Junts que no forman parte del Govern se sentaran en ese foro. Dio un plazo de 24 horas para presentar otra lista, pero no lo hicieron.
Volviendo a Puigdemont, señaló que está “viendo diálogo pero no estoy viendo negociaciones. Hay una gran parte del independentismo, la que representamos nosotros, que no está sentada en esa mesa porque no está convocada, no está aceptada”.
Puigdemont volverá a Cerdeña
Por otro lado, mostró su satisfacción por cómo acabó su detención y apuntó que su único propósito es volver a su actividad europarlamentaria. Además, aseguró que volverá el lunes para declarar ante la Corte de Apelación de Sassari, en Cerdeña. “Estoy convocado por la justicia y siempre que me han citado he asistido”, apostilló.
Asimismo, Puigdemont agradeció “profundamente” la visita de Aragonès y de otros altos cargos, como Puigneró y Laura Borràs, la presidente del Parlament.
Por último, dijo que los jueces “no pueden tener opinión ni decidir cosas por su antagonismo hacia mi persona y hacia mis ideas. Esto ha pasado en España”.
“España no tiene un proyecto político para Cataluña. En cuatro años ha sido incapaz de poner una propuesta encima de la mesa atractiva, que pueda competir con la idea de una Cataluña independiente”, concluyó.