En una entrevista en La Vanguardia, Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ha abordado diversos temas, entre ellos el de los presos independentistas. Asimismo, manifestó su deseo de retomar las conversaciones de la mesa de diálogo con la Generalitat catalana este julio.
Respecto a este asunto, comentó que ve “un contexto difícil en Cataluña, puesto que se está generando una situación claramente preelectoral”. Sostuvo que se deben “abordar problemas que desgraciadamente han devenido en estructurales por la falta de voluntad política, como es en este caso la crisis política en Cataluña, que tiene una derivada de convivencia”.
En ese sentido, su planteamiento es retomar el diálogo en un marco que parta de la legalidad. Después, llegar a “un acuerdo político que tendrá que ser, lógicamente, refrendado por la sociedad catalana en una votación”.
Es en ese punto cuando se refirió a los presos independentistas, preguntado acerca de un posible indulto. “En la política penitenciaria las medidas de gracia están claramente definidas en nuestra jurisdicción y también en los actores jurisdiccionales”, respondió.
Con todo, subrayó, la política “es dinámica y es evidente que la prioridad ahora mismo del conjunto de la sociedad española, y también de la sociedad catalana, es la crisis económica”.
En ese sentido, Sánchez recordó que el Ejecutivo ha puesto a disposición de las comunidades autónomas 16.000 millones de euros. Un fondo para atender las necesidades de cada autonomía tras la crisis del coronavirus.
Más asuntos al margen de los presos independentistas
Pero no sólo se refirió el presidente a Cataluña. También lo hizo en cuanto a la polémica sobre el Rey emérito, acerca de lo que aseguró que “no existe la impunidad” en España. “Lo importante es que dejemos a la justicia trabajar y respetemos su independencia”, señaló.
“Lo que puedo decir es que la relación que mantengo con el Rey Felipe VI es de extrema cordialidad”, añadió. Además, rechazó completamente que actores ajenos al ámbito fiscal estén queriendo erigirse en fiscales y jueces.
Igualmente, resaltó que “la gran lección de esta pandemia, tanto en España como en Europa y otras zonas del mundo, es que Occidente llegó tarde”. A pesar de ello, aseveró, muchas fuerzas políticas no habrían apoyado el estado alarma con anterioridad.
Defendió la gestión llevada a cabo por el Gobierno y reivindicó para sí que “por primera vez el presidente se ha reunido en más de catorce ocasiones con todos los presidentes autonómicos”. “Se ha engrasado una cultura de cooperación, que reivindico”, señaló antes.
Tras ello, sostuvo que la coalición de Gobierno entre PSOE y Unidas Podemos sigue en pie y “no está en cuestión”. A su vez, hizo un guiño a Ciudadanos al afirmar que los pactos con la formación naranja son compatibles con la alianza del Ejecutivo.
Es entonces cuando quiso resaltar el “cambio de actitud” de “algunos actores políticos”. “A partir de aquí, ha habido un cambio de actitud por parte de algunos actores políticos, singularmente Ciudadanos. Entiendo que este partido ha visto que la estrategia de alineación total con el Partido Popular y Vox le llevaba a quedarse sin espacio”, zanjó.