La moción en Murcia podría fracasar si finalmente los diputados de Ciudadanos con los que el PP ha llegado a un acuerdo votan en contra. Según fuentes de Génova y del Partido Popular de Murcia, “se mantiene el pacto firmado, sólo cambian las personas”.
“El programa y la composición en el gobierno siguen como hasta ahora. Necesitamos estabilidad”, añaden las mismas fuentes. De concretarse, sería un tremendo golpe a la formación naranja.
La maniobra popular consiste en que Isabel Franco, la vicepresidente del Gobierno murciano, Valle Miguélez, diputada de Ciudadanos y Francisco Álvarez, también parlamentario, voten en contra. Son tres de los seis diputados con que cuenta la formación naranja en el Parlamento murciano.
Desde la sede del PP en Madrid apuntan que “no son trásfugas”, sino que siguen apoyando al Ejecutivo en el que estaban. Dicho Gobierno fue fruto de un pacto entre ambas formaciones que, con el apoyo externo de Vox, dio la Presidencia a Fernando López Miras.
Desde las filas populares explican que Ana Martínez Vidal, que encabeza la moción en Murcia, mantiene una pugna con el resto de su grupo. Comentan que arriesgó sin tener asegurados los apoyos y de ahí que no le vaya a salir la jugada.
Por su parte, Teodoro García Egea, secretario general del PP, se desplazó a la región para dirigir la operación. Desde la formación conservadora aseguran que “está todo hecho”.
Tal es así López Miras comparecerá a eso de las 13:30 para dar cuenta del acuerdo. Lo acompañará Isabel Franco, mostrando una imagen que demostraría que el pacto está sellado.
Este pasado miércoles PSOE y Ciudadanos registraron una moción en Murcia para hacer caer el Gobierno de López Miras. Ese movimiento provocó la disolución de la Asamblea de Madrid por parte de Isabel Díaz Ayuso y la convocatoria de elecciones anticipadas.