Que Errejón se ha convertido en una obsesión para Podemos es una obviedad. Que la formación populista filtra intoxicaciones a los medios es harto conocido.
Y, ahora, que del entorno de Rafael Mayoral -quien no pinta nada en Podemos y desde Más País dan por muerto-, se filtró la noticia de que Íñigo colocó a su padre es la comidilla de los medios de comunicación.
También se ha conocido que el propio padre del fundador de Más Madrid y, por extensión, de Más País dudó a la hora de aceptar la propuesta. En su fuero interno pensaba que podía ser un problema para su relación familiar. Al final, lo hizo por su compromiso con el proyecto de su hijo.
Con todo, hay división interna en el grupo parlamentario de Más Madrid. Hay quienes no ven mal que José Antonio Errejón entre a formar parte del órgano que asesorará al Gobierno de la región sobre el reparto de los fondos europeos. Argumentan, entre otras razones, que no es un puesto remunerado. Otros, en cambio, no lo consideran adecuado.
En cualquiera los casos, la repercusión mediática que ha tenido el asunto ha provocado cierto alboroto en el seno del grupo parlamentario. Sobre todo, desde que PP, Ciudadanos y Vox hayan cuestionado los conocimientos que el progenitor de Íñigo tenga sobre el tema.
También, por algunos comentarios que han llegado desde la formación de ultraderecha: “bochornoso, hasta poco ético”. O “huelen como hienas dónde vienen los recursos”.
Sin embargo, José Antonio, ya jubilado, se autodescribe como un comunista marxista. Lo cierto es que fue miembro del PTE y del PCE, así como de la Joven Guardia Roja, co-fundador de los Verdes y militante de la izquierda anticapitalista.
Fue director del entonces ICONA. Además, fue víctima de ‘Billy el Niño’, algo que se conoció en el Congreso cuando se aprobó retirarle las medallas al torturador.