En Chile se decide hoy dejar atrás la Constitución elaborada durante la dictadura de Pinochet. El referendo se produce tras el acuerdo entre el Gobierno de Sebastián Piñera y la oposición de noviembre pasado.
El país mantiene una Constitución desde los tiempos de Augusto Pinochet. Ahora, tras 40 años, parece que la sombra del dictador se borra definitivamente de las tierras del país Andino.
El plebiscito ha coincidido con el estallido de las protestas contra Piñera, que se están saldando desde hace algunas semanas con nuevo altercados.
Todo parece apuntar a que los chilenos darán luz verde a una nueva Constitución, ya que el 69% por ciento de la población así lo quiere, tras las últimas encuestas.
Después vendrá la tarea de elegir quién se hará cargo de elaborar la nueva Carta Magna de Chile. Para ello, se barajan dos opciones. La primera, con la creación de una Comisión Mixta Constitucional creada a partes iguales entre miembros elegidos popularmente y parlamentarios. La segunda, una especie de Convención Constitucional, conformada por miembros elegidos popularmente.
También aquí hay encuestas. El 61% prefiere esta última opción. Estaría formada por 155 ciudadanos, con igual numero de hombres y mujeres. Por el contrario el 21% se decanta por la Comisión Constitucional, que estaría compuesta por 86 ciudadanos y 86 políticos.
La opción que consiga más del 50% de los votos será la elegida, y dispondrá de un plazo de nueve meses (prorrogables a tres meses más, pero solo una vez), para elaborar el texto.
La actual Constitución de Chile data de 1980. Ha sido enmendada en 42 ocasiones y es vista por la izquierda chilena como culpable de la desigualdad que sufre el país.
Uno de los temores en torno al proceso de reforma es el riesgo de politización, ya que coincide con una apretada agenda electoral y elecciones en el país andino el 21 de noviembre.
Por eso, en caso de confirmarse la victoria de la Convención Constitucional, sus integrantes serán elegidos en abril de 2021, para echar a andar en mayo.
También podría darse el caso de que algunas de las promesas electorales se vieran incorporadas al nuevo texto, ya que muchos miembros de la Convención tendrían intereses políticos.
Los más de 2.000 colegios electorales abrirán a las 8.00 de la mañana, hasta las 20.00 horas de la tarde. También se ha abierto un periodo especial de 14:00 a 17:00h para que puedan votar mayores de 60 años, embarazadas y personas con discapacidad.
Además, 23.000 Carabineros y otros tantos militares velarán por la seguridad en la que se espera que grupos minoritarios tratarán de perturbar la jornada.