Ayer murieron al menos 25 personas en una de las fábricas textiles clandestinas en la ciudad marroquí de Tánger, al norte del país. Se apunta a que las inundaciones por las fuertes lluvias caídas provocaron un cortocircuito de algunas instalaciones, según las autoridades de Marruecos.
En un comunicado oficial detallan que el taller ilegal, ubicado en el barrio Al Mars, al sur de la ciudad, tuvo una filtración de agua de lluvia. Como consecuencia, los trabajadores resultaron electrocutados.
Con todo, los equipos de rescate consiguieron sacar con vida a diez personas que se encontraban en el sótano de una vivienda en Hay Alinas. Sin embargo, se encontraron los cuerpos sin vida de 25 personas, informa la agencia estatal de noticias marroquí MAP.
En la noche de ayer continuaban las operaciones de búsqueda en esa instalación, una de las muchas fábricas textiles clandestinas que permite el régimen alauí. Se teme que haya más víctimas mortales o heridos.
Por su lado, las autoridades han abierto una investigación para tratar de aclarar las causas del suceso y establecer, así, responsabilidades.
Las primeras conclusiones apuntan a la electrocución de los obreros. El taller estaba en el subsuelo de un barrio residencial y la tromba de agua provocó un cortocircuito, fulminando a los trabajadores.
Otra teoría es que los obreros pudieron morir ahogados. Las fuertes lluvias en toda la región han causado inundaciones en todos los barrios bajos de Tánger.
Según detallan, el taller clandestino tenía dos niveles subterráneos. Los cadáveres se encontraron, en su mayoría, en el más bajo.
Por el momento se han hallado los cuerpos sin vida de 18 mujeres y siete hombres. Otras diez personas lograron salvar la vida, si bien fueron ingresadas en el Hospital Regional de Tánger.
Entre los fallecidos hay varios miembros de una misma familia, apunta un testigo En la fábrica ilegal trabajaban unas 40 personas, explica el portal le360.ma.