El PSOE se opondrá a los Presupuestos.
Así lo anunció ayer en rueda de prensa en Ferraz Pedro Sánchez, secretario general de los socialistas, que los ha calificado como “ideológicos, no sociales, que atacan al Estado del Bienestar, que no defienden ni a las mujeres, ni a los trabajadores pobres, ni a los parados de larga duración, ni a los jóvenes”, y son fruto de un acuerdo entre PP y Ciudadanos que, “si algo demuestra, es que ambas formaciones políticas al final son lo mismo pero con distinto nombre”. A su juicio, el Gobierno está empleando con estas cuentas “la misma técnica que en los últimos años”, es decir “inflar la previsión de ingresos públicos y luego cuadrar las cuentas recortando o no ejecutando las partidas vinculadas al gasto social o productivo”.
El líder socialista ha vuelto a señalar que si los PGE no superan la enmienda a la totalidad en el Congreso de los Diputados, “Rajoy tendrá como mínimo que someterse a una cuestión de confianza para ver si tiene o no la confianza mayoritaria de la Cámara para poder seguir gobernando en nuestro país”. También avanzó que la próxima semana la Ejecutiva del PSOE presentará su “alternativa presupuestaria”, que “tendrá dos líneas rojas”: la reducción del endeudamiento público y el cumplimiento de los objetivos marcados de déficit público, al tiempo que demostrará que, “dentro de esas limitaciones, es posible hacer una política expansiva, de modernización de nuestro gasto productivo y de fortalecimiento de los pilares del Estado del Bienestar”.
Las razones para oponerse
Sánchez desgranó las 7 razones por las que el PSOE se opondrá a los PGE. En primer lugar, por una razón de forma, ya que estos PGE “llegan tarde y llegan mal, con 6 meses de retraso”, lo que demuestra el agotamiento del proyecto político del Gobierno y sus dificultades para que estas cuentas puedan sortear la enmienda a la totalidad; en segundo lugar, porque “se trata de unos presupuestos continuistas, coherentes con la política económica de recortes planteada por el Ejecutivo en estos 7 años” y que consolidan “un crecimiento sin derechos”; la tercera razón es que estos PGE “son ideológicos, no sociales” y “estamos ante el intento de consolidar un estado social mínimo, low cost, donde la idea del Gobierno de alinear el gasto público a un horizonte de ingresos públicos del 38% del PIB”, cuando la media en la UE está en torno al 45, 46 ó 47% del PIB, lo que nos sitúa en parámetros semejantes a Bulgaria. Por tanto, “si salen adelante estos PGE lo que van a implicar es que la salida de la crisis económica de muchos colectivos, mujeres, hombres, trabajadores pobres, jóvenes o pensionistas, se va a ver dificultada”, advirtió Sánchez.
Como cuarta razón, Sánchez señaló que estos PGE “son un ataque al Estado del Bienestar”. Apuntó que en educación el Gobierno sitúa el gasto educativo por debajo del 3,7% del PIB, muy lejos del casi 5% de media que tienen los países de la UE y que se fijan los socialistas; en sanidad, el gasto está por debajo del 6%, lo que también nos sitúa por debajo de la media en gasto per cápita de la UE; en dependencia consolidan los recortes de 3.700 millones, y en materia de pensiones “perpetúan la dictadura del 0,25% para los pensionistas, no plantean ninguna medida extraordinaria que implique reducir el déficit de la Seguridad Social y vienen a establecer más incertidumbre e inseguridad en las pensiones de nuestros mayores”.
Como quinta razón, el PSOE se opone a la política “ineficaz e injusta” que encierran estas y las anteriores cuentas, que “han hecho descansar el ajuste en el gasto público”, mientras aprobaba una reforma fiscal que beneficiaba al 10% más pudiente de la población, y supuso una merma en los ingresos de 15.000 millones de euros.
Además, los PGE “no atienden las necesidades de abordar la modernización de nuestro aparato productivo en el medio plazo”. En este punto ha reiterado la petición al Gobierno de que impulse, en el marco del diálogo social, una subida salarial, ya que en el reparto de la renta tenemos el mismo nivel de masa salarial que en 1989, lo que supone haber retrocedido 30 años. Y en relación con la I+D+i, los PGE –dijo- “platean una atonía de la evolución de la productividad”. También criticó la ausencia o escasa inversión presupuestaria en industria y transición ecológica, en vivienda para jóvenes, lucha contra la pobreza o igualdad de género.
Finalmente, Sánchez los tachó de “no creíbles”, pues en 2017 la recaudación por IRPF crecía en un 6,4% y en 2018 el planteamiento -con una tasa de crecimiento inferior y una rebaja fiscal fruto de su acuerdo con Ciudadanos- es del 6,5%, lo que demuestra que dicho incremento “no va a producirse”.