Page: «He perdido la cuenta de las veces que Podemos ha cambiado de opinión»

Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, se ha referido, entre otros asuntos, a la posición de Podemos respecto a un pacto con C’s para los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Ha sido en una entrevista con Europa Press, dejando claro: “He perdido la cuenta de las veces que Podemos ha cambiado de opinión”.

En ese sentido, ha señalado que la formación morada lleva suficiente tiempo gobernando para saber que “los ultimátum no funcionan”. Es más, dijo, “cuando se gobierna, además de predicar hay que dar trigo”. Así, avisó a Podemos de que se encuentran “ante la cruda realidad”.

“No se trata de ganar votos pintando la realidad como cruda, sino de gestionar la cruda realidad, y eso lo tienen que aprender. No hay nadie que no haya pasado por esa experiencia. Llevo mucho tiempo sin oír a nadie hablar de casta”, reflexionó.

Siguiendo con el asunto de un posible acuerdo con Ciudadanos, García-Page dijo que se siente más cómodo con un proyecto socialdemócrata. Uno que esté respaldado por una mayoría socialdemócrata.

“El proyecto tiene que ser al 90 por ciento lo que diga el Gobierno. Los que tengan votos, que pongan comas y acentos, hasta ahí normal. Un diputado de una provincia o 34 independentistas no pueden condicionar todo el país”, aseveró. Mostraba, en cierto modo, su preferencia.

En ese sentido, el de los PGE, el presidente castellano-manchego alertó de que en Europa no entenderían que lleguen 140.000 millones sin unas cuentas aprobadas.

“No sé si tienen que apoyar, pero hay que permitirlo. A la hora de la verdad, no pasa del 5 por ciento de cambio respecto a lo que hay, no hay más margen, son habas contás”, explicó. Por eso, instó a cerrar un consenso de Estado, no para apoyar, pero sí para permitir unos Presupuestos.

Para García-Page, Pablo Casado “no es radical”

García-Page también habló del PP y de Pablo Casado, líder del partido conservador. De él dijo que “no es radical” y que puede “reubicarse en una estrategia más moderada”. No obstante, dijo no saber acerca de su entorno y los que le influyen.

“Intuyo que él no está cómodo en un papel en el que sabe que no va a ser Abascal y que para ser presidente del Gobierno no puede ser Abascal. Pero, al mismo tiempo, ha llegado tan lejos en el ataque al Gobierno que le parece contaminante darle la mano”, opinó.

En esa línea, el presidente castellano-manchego considera que, si Casado quiere llegar a La Moncloa deberá ir más lejos. Tendrá que abanderar planteamientos de consenso que el Gobierno no podrá más que aceptar. “Mientras no consiga eso, no se despegaba de Vox”, sentenció.