Nueva entrega de encuestas sobre las elecciones autonómicas en Madrid en la que se da un empate técnico en el resultado con Ciudadanos como llave.
En esta ocasión se trata de la de NC Report para La Razón. Como sucede en la mayoría de otros sondeos, el PP sube, pero a costa de Vox y lo que queda de la formación naranja.
En la última de la que nos hicimos eco, Isabel Díaz Ayuso, la candidata popular, quedaba más cerca de la mayoría absoluta sin la extrema derecha. En la de NC Report el resultado es más moderado.
Tal es así que se produciría un empate entre el bloque de la derecha/ultraderecha y el de la izquierda si Ayuso no tiene el apoyo expreso de Edmundo Bal.
Así, el porcentaje de un 41,7% de los votos permitiría al PP sentar a 58 diputados en la Asamblea de Madrid. Enfrente, el 25,5% y 35 escaños del PSOE, al que sigue el 10,3% de sufragios y 14 representantes de Más Madrid.
En ese escenario, Unidas Podemos consigue sobrepasar en porcentaje y diputados a Vox. El ‘efecto Iglesias’, aunque empieza a diluirse, sirve a los morados para cosechar un 8,6% de las papeletas y hacerse con 12 escaños. Se aleja, de ese modo del precipicio del 5%.
Por su lado, pese a la entrada de Santiago Abascal en la campaña, pierde apoyos y logra el 7,9% y 10 representantes. Por último, Bal consigue frenar la caída y mantiene el 5,1% de los votos, que le permite 7 diputados.
Ayuso modera su ascenso en Madrid, aunque sigue subiendo
De esta encuesta se deduce que, aunque sigue sumando, Ayuso modera su ascenso, pero la campaña no ha empezado oficialmente. Hasta ahora se estaba nutriendo de los votantes del partido naranja.
Ahora, también araña votos de la formación que lidera Rocío Monasterio en Madrid, que se asoma al precipicio. A su vez, la sangría que venía padeciendo Ciudadanos parece frenarse.
Por el otro lado, los socialistas también pierden apoyos y ceden dos diputados de los 37 con los que cuenta en Vallecas. Su porcentaje también cae ligeramente, medio punto, comparado con el sondeo anterior.
Asimismo, Mónica García resiste y amortigua el ‘efecto Iglesias’ e incluso sube respecto a la encuesta anterior de esta demoscópica. A su vez, Iglesias frena su ascenso, lo que podría indicar que el trasvase de votos desde el PSOE o desde Más Madrid se ha detenido.
Vox acusa el golpe del ‘efecto Iglesias’ a favor del voto útil de la derecha, que se decanta por el PP. Con todo, su aportación sería definitiva puesto que Ayuso necesitaría de Monasterio para gobernar.
Empate técnico = otras elecciones
Sin embargo, podría producirse un empate técnico. La derecha/ultraderecha suma 68 diputados, por lo que necesita el respaldo de Ciudadanos.
Y no está en absoluto claro que Bal respalde un gobierno en el que esté Vox. De hecho, el candidato naranja aseguró que no lo hará, con lo que iríamos a nuevas elecciones.
Si Ciudadanos votara por un Ejecutivo sólo del PP, la Comunidad sería ingobernable porque Vox no permitirá que salgan adelante según qué iniciativas.
Así las cosas, la izquierda suma menos, 61, por lo que ni con los diputados naranjas a favor podría formar Gobierno.
Con todo y con eso, la campaña no ha arrancado. Iglesias confía en movilizar a los barrios y municipios del Sur, los más castigados por Ayuso. Llama, como el resto de la izquierda, a acudir en masa a las urnas.
Pero la realidad a día de hoy es que la participación se situaría sólo tres décimas por encima de 2019, hasta el 64,6%. Si no se alcanza y supera el 70%, la izquierda tiene muy difícil ganar estas elecciones.