Christine Lagarde, la presidente del Banco Central Europeo (BCE), ha insistido en que sigue siendo poco probable una subida de los tipos de interés en 2022.
Ello, pese a la “significativa” revisión al alza de las previsiones de inflación para la eurozona. También a pesar de las medidas adoptadas por la Reserva Federal de Estados Unidos del Banco de Inglaterra. Este jueves han subido el precio del dinero por primera vez desde 2018.
Así, Lagarde ha anunciado, después de la reunión del Consejo de Gobierno del BCE, la decisión de mantener los tipos de interés en el 0%. “Sigue siendo bastante improbable que subamos los tipos en 2022, pero nos guiamos por los datos”, sostuvo.
Y es que la francesa lleva tiempo defendiendo que no hay prisa en subir los tipos de interés, pese a la subida de la inflación. De hecho, hace un par de semanas sostuvo que la inflación en la zona euro ha tocado máximos.
En cambio, otros grandes bancos centrales han comenzado a subir tipos o retirar estímulos. Es el caso de la Fed estadounidense, que este miércoles anunció la retirada acelerada de estímulos para ganar margen a la hora de subir tipos de manera agresiva.
Por su lado, el Banco de Inglaterra también han anunciado que sube la tasa de referencia en 15 puntos básicos, hasta el 0,25%.
En ese sentido, Lagarde ha insistido en que la posición en el ciclo económico de la eurozona es distinta de la de estos países. Por tanto, no se puede asumir que, “si algo pasa con la Fed, pasará con el BCE”.
Al margen del mantenimiento los tipos de interés, la autoridad monetaria europea ha decidido dar por concluido en marzo el programa de compras contra la pandemia. Así estaba previsto.
Sin embargo, dará un nuevo impulso, temporal, a su programa de compra de activos convencional. Así, durante el primer trimestre de 2022 adquirirá 20.000 millones netos de activos mensuales.
En cambio, en el segundo trimestre la cifra se elevará a 40.000 millones por mes, mientras que en el tercero será de 30.000 millones mensuales. Entre octubre y final de 2022, las compras volverán a situarse en 20000 millones netos mensuales.