Aquellas personas que de repente pierdan sus ingresos no estarán obligadas a esperar un año para solicitar el Ingreso Mínimo Vital (IMV). Es el acuerdo al que han llegado el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y el de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Además, se tendrán en cuenta los ingresos de los últimos meses. “Ahora podremos tener en cuenta los ingresos de los últimos meses para solicitar el IMV”, explicó Ione Belarra, ministra de Derechos Sociales.
“La novedad más relevante es que se utilizará la cantidad de ingresos más beneficiosa para la persona. Bien la del año anterior, bien la de los últimos meses”, abundó
De este modo, “si a una persona le ha ocurrido una situación sobrevenida y una caída de ingresos, no tiene que esperar al siguiente año para solicitar el IMV. Esto tiene por objetivo que no haya gente que se quede en tierra de nadie”, señaló.
En una rueda de prensa conjunta con José Luis Escrivá, ministro de Seguridad Social, detallaron las mejoras que han acordado. Entre ellas, el aumento de la prestación en un 22% para familias con algún miembro con discapacidad igual o superior al 65%.
Además, no se considerarán como ingresos aquellas prestaciones que se perciban asociadas a la Dependencia. Según apuntaron, se vulneraba “el principio de equidad” de las familias con una persona a cargo y en situación de pobreza.
A su vez, los jóvenes que ya no están tutelados no tendrán que demostrar un año de vida independiente para solicitar el IMV. También recibirá acompañamiento concreto para la integración laboral. Para el resto de los jóvenes menores de años el requisito en cuanto al tiempo de vida independiente baja 3 a 2 años.
Asimismo, destaca entre las mejoras que quienes agoten el subsidio de desempleo y no tengan de otra fuente de ingresos, no verán reducida su cuantía. Hasta ahora, quedaban “desprotegidos”, según señaló Belarra.
Por su lado, Escrivá informó de sus cálculos respecto al alcance de las mejoras de las medidas. Incluyendo el complemento de hasta 100 euros por hijo a cargo, cree que se llegará a duplicar el número de hogares que se beneficiarán de ellas. Actualmente son 350.000 familias.