Los procedimientos para iniciar el impeachment contra Donald Trump, presidente de Estados Unidos, fueron aprobados la semana pasada y, por el momento, cuatro altos cargos de la Casa Blanca se han negado a comparecer ante el Congreso estadounidense.
Ayer Russ Vought, director interino de la Oficina de Presupuestos de la sede de la Presidencia, Michael Duffey y Brian McCormack, directores adjuntos, se han sumado a la negativa a testificar de Rick Perry, secretario de Energía de Estados Unidos. Estas decisiones suponen un desafío a la citación y conlleva consecuencias.
Perry, que dejará su cargo en este mismo año, fue el primero en negarse a acudir a prestar declaración ante las comisiones de la Cámara de Representantes que investigan la posibilidad de abrir el juicio político contra Trump que podría llevar a su destitución.
“El secretario no participará en una inquisición secreta donde el abogado de la agencia tiene prohibido estar presente”, señaló este fin de semana Shaylyn Hynes, portavoz del Departamento de Energía.
Añadió que “si la comisión está interesada en llevar a cabo un procedimiento serio, pueden enviar una invitación para participar en una audiencia abierta para la consideración del secretario, donde el abogado del departamento pueda estar presente y el pueblo estadounidense lo pueda presenciar”.
Se investiga un posible abuso de poder por parte del inquilino de la Casa Blanca debido a una conversación telefónica mantenida el pasado 25 de julio con Volodimir Zelenski, presidente de Ucrania, en la que le pedía que hiciera todo lo posible para que la Fiscalía del país investigara a Joe Biden, su más que posible rival en las Presidenciales de 2020, y a su hijo Hunter.
Este último sostiene que los trabajos llevados a cabo por él como consejero de la compañía ucraniana gasista Burisma fueron limpios y lamenta que no fue capaz de prever la repercusión que podría tener su cargo en empresas extranjeras para la carrera política de su padre.
Para Trump, Hunter Biden está involucrado en casos de corrupción durante su etapa como consejero de esa compañía energética, extendiendo sus acusaciones al propio Biden, de quien asegura que impidió investigaciones judiciales por la gestión empresarial de su hijo.