Los periodistas que cubren las informaciones de La Moncloa, así como los tertulianos y analistas de este tipo de información siguen molestos con Miguel Ángel Oliver, secretario de Estado de Comunicación, por las declaraciones hechas el pasado miércoles en una mesa redonda.
En ella, titulada El papel de la ética en el periodismo, Oliver respondió a las críticas de aquellos periodistas que no están de acuerdo con las limitaciones que impone la política de comunicación de Moncloa, al reducir los turnos de preguntas en las comparecencias ante la prensa.
Ironizando, se refirió a los profesionales de la información que cubren las actividades parlamentarias y del Gobierno como “todos tertulianos”. Aseguró que esos periodistas iban luego a los programas de televisión a manifestar sus opiniones particulares.
Uno de los periodistas más conocidos ha declarado que el secretario de Estado de Comunicación “es el ideólogo de haber mostrado las manos del presidente, debería ser más prudente”. Otro conocido periodista ha dicho que “tarde o temprano ha de volver a la profesión”.
En esa mesa redonda, Oliver afirmó que “no debe haber un derecho a obtener respuestas”, a la vez que pedía a los periodistas que hicieran “autocrítica”. Añadía que sus compañeros de profesión “son insaciables. ¿Todas las veces tienen que ser respondidas las preguntas? Políticamente, no”.
Tras las críticas que le llovieron desde toda profesión, el secretario de Estado de Comunicación ha utilizado su cuenta de Twitter para pedir unas medias disculpas: “Pido disculpas si he ofendido a algún periodista, en especial a quienes cubren la información del Gobierno”. Aun así, insiste en invitar a “reflexionar sobre nuestra profesión”.