Ella me dijo para siempre y ese siempre fueron cuatro años llenos de dificultades y disgustos. Después la despedida fue hasta nunca y aparecía de vez en cuando, asomando la cabeza pidiendo cariño. Hasta que la última vez fue hasta la próxima y no volvió nunca más.
Los relatos de Aina. “Promesas”, por Aina Rotger.
