Tras la erupción del volcán de Cumbre Vieja, se había previsto que la lava llegara al mar la pasada noche puesto que avanzaba a unos 700 metros por hora. En su camino, ha arrasado más de 150 viviendas.
Así lo avanzó Ángel Víctor Torres, presidente de Canarias. No obstante, podría retrasarse porque el magma se ha repartido en tres grandes lenguas. Con ello, la velocidad a la que avanza se ha reducido a 400 metros por hora.
Pero, ¿qué ocurrirá cuando llegue al mar? Los científicos creen que entrará en el océano en la costa de Tazacorte, seguramente en Playa Nueva, en Los Guirres.
Cuando el magma toque las aguas se producirá un choque térmico. La lava ha alcanzado los 1.000oC, mientras que el agua está a 23oC. Así las cosas, el magma se enfriará rápidamente.
Entre las primeras consecuencias de ese brusco enfriamiento será la aparición de grandes nubes de vapor ácido y gases. Estos sedimentarán y se incorporarán a la superficie.
El gran peligro de esa nube ácida es que puede provocar irritaciones en la piel y los ojos, además de problemas respiratorios. Por eso, los expertos aconsejan que la población no salga de sus casas salvo que sea imprescindible.
Además, según ha explicado en un programa de laSexta Nahúm Méndez, geólogo y divulgador científico, se pueden generar “partículas sólidas”. Dichas partículas se producen por la fractura que se puede producir en la lava al entrar en contacto con una temperatura mucho más baja.
Asimismo, el científico alerta de que esas partículas sólidas “nos pueden golpear y matar”.
En esa misma línea ha avisado José Mangas, catedrático de Geología de la Universidad de Las Palmas. “Habrá explosiones. Es como si mezcláramos aceite hirviendo con agua. Se puede generar una lluvia ácida que cause a la población irritaciones de garganta y de nariz”, señala.
Por otro lado, el Ministerio de Transportes advierte de que la llegada del magma al mar supone un peligro para la navegación marítima. Por ese motivo, pide que los barcos eviten navegar por las zonas marcadas como de riesgo.