Sucede cuando son infectadas por un hongo.
No les pasa a todas las hormigas, tan solo a la especie llamada Camponotini, que, al ser infectada y secuestrada por el hongo Cordyceps unilateralis, se convierte en zombi.
El hongo empieza a consumir tejido blando después de ir por debajo del exoesqueleto de la hormiga. Entonces toma el control del cuerpo y mediante mecanismos que no se conocen la hormiga abandona el hormiguero hasta que encuentra una hoja, la muerde y muere.
Sin embargo, el hongo sigue creciendo y pudriéndose dentro del cuerpo de la hormiga, hasta que atraviesa la cabeza de su huésped y liberal sus esporas en un proceso que puede llegar a durar más de diez días.
El cerebro con hormigas y dentro de ella pero en control pertenece al hongo. Este libera esporas para infectar a otras hormigas. Algunas especies de estos insectos son capaces de reconocer a las hormigas infectadas y las alejan de la colonia para evitar infecciones.