España no cumplirá los objetivos de déficit para 2019 y 2020 si no tiene nuevos Presupuestos. Es lo que la Comisión de Asunto Económicos, con Pierre Moscovici a la cabeza, ha advertido, porque aunque la economía española se muestra más fuerte que las del resto de la zona euro, no es ajena a la desaceleración.
El comisario descarta la recesión, pero alerta acerca de los “riesgos a la baja”. Así, revisa a la baja las previsiones de crecimiento hasta el 1,1% este año y el 1,2% los dos siguientes por la amenaza de las tensiones políticas y comerciales reinantes.
La Eurozona seguirá creciendo este año, y van seis consecutivos, y Bruselas no quiere hablar de recesión. Ello a pesar de una inflación de en torno al 1,2% -lejos de su objetivo del 2%- y siempre que se cumplan el resto de previsiones.
Pero los riesgos existen: guerras comerciales; tensiones geopolíticas; Brexit aun sin concretar. Todo ello impide que despeguen las economías emergentes, lo que agudiza lo sombrío de las perspectivas.
“Debemos estar preparados para todos los escenarios”, advirtió Moscovici. La desaceleración, como ya alertó el miércoles el Fondo Monetario Internacional, puede terminar contagiando a otros sectores –servicios, en especial- y no solo al industrial, el que más ha acusado la ralentización de la economía.
Algo que afectaría especialmente a Europa del Este, pese a que, gracias a los fondos de cohesión, crece con más vigor que el resto. Los Diecinueve de la zona euro han visto cómo lentamente se van rebajando sus previsiones de crecimiento.
“Europa entra en una fase más plana, con riesgos bajistas, pero no de recesión”, reiteró el comisario europeo, a pesar de lo cual siguen cayendo las perspectivas, aunque confía en que el 1,2% previsto para 2020 se mantenga también en 2021.
Con Alemania la cosa es menos optimista aún, estancada en el 0,4%, por lo que ha pedido que el Gobierno alemán permita una mayor inversión: “Si hace un poco de frío, habrá que subir la calefacción”, comentó.
Italia está al borde de la recesión, con un avance de solo un 0,1% y sin apenas margen de maniobra a causa de sus débiles finanzas públicas. Las proyecciones apuntan a un déficit del 2,7% y una deuda del 137,4% del PIB en 2021. Pese a ello, no se van a devolver los Presupuestos a Roma, “por ahora”.
Francia, al igual que España, se comportará mejor. Nuestro vecino crecerá un 1,3% en 2019 y en 2020, fruto de las medidas adoptadas para afrontar la crisis de los chalecos amarillos.
Para España, la rebaja es hasta el 1,9% para este año y el 1,5% en 2020, además de fijar el crecimiento de 2021 en el 1,4%. En julio, la proyección era cuatro décimas mayor, pero buena parte del recorte se debe al cambio en la contabilidad nacional, pero también a la desaceleración del consumo interno.
A pesar de este retoque de Bruselas, Nadia Calviño, ministra de Economía en funciones, mantiene que el ritmo de crecimiento estará por encima del 2% porque el análisis de la Comisión ha sido anterior a publicarse los datos del tercer trimestre. Según la ministra, España creció en ese periodo un 0,4%, mientras que la previsión de Bruselas es del 0,3%.
Así, Calviño sostiene que “sobre la base de los datos y la información que tenemos en este momento, para que la economía española cerrara 2019 con un crecimiento inferior al 2% tendríamos que estar viviendo una realidad en nuestro país que no se corresponde en absoluto con los indicadores que estamos recibiendo y la realidad que me están transmitiendo los agentes económicos”.
Con todo, Moscovici señaló que la inestabilidad política no afecta tan decisivamente a la economía porque se ha demostrado que “con gobiernos minoritarios” ha habido un crecimiento “brillante” en España.
El factor político “no parece que tenga repercusiones en el crecimiento, pero sí en la ralentización en el rimo de las reformas estructurales”, indicó con cautela.
Sin embargo, desde Bruselas se insiste en que es necesario que haya unos Presupuestos porque, sin ellos, la previsión es que el déficit se dispare al 2,3% del PIB, por encima del 2% proyectado, en 2019, y del 2,2% en 2020, cinco veces más del trasladado por España.
La subida de salarios de los trabajadores públicos, la revalorización de las pensiones y la bajada del ritmo de crecimiento están detrás de este incremento del déficit.
A ello se une que la Comisión ha previsto que el ritmo de creación de empleo caerá a la mitad el próximo año y la tasa de paro no bajará del 13% hasta 2021.
No obstante, el comisario subrayó la “posición más resistente” de la economía española para hacer frente a la desaceleración, en especial por el superávit exterior logrado durante el periodo expansivo.
La UE advierte a España que no ha presentado presupuestos. ¿Quiénes han sido los culpables de que España no haya presentado presupuestos? Pregúntenle a Casado, a » Riverita» y a Pablo Iglesias que han bloqueado la formación de un Gobierno en España y que quieren seguir haciéndolo. Solo atienden sus intereses partidistas, no atienden las necesidades de los ciudadanos, están todos unidos para derribar a Pedro , todos contra el PSOE, unos por revanchismo político otros porque quieren poltronas. Sin Gobierno, no hay presupuestos, no se puede atender las necesidades de los ciudadanos, no se puede atender los requerimientos de la UE, y puede surgir una ralentización descomunal de la Economía ,y después esos partidos culparán a Pedro de haberla provocado.
La ralentización de la economía puede surgir España, y estos exaltados y oportunistas políticos que tenemos en España no colaboran para que se forme un Gobierno lo antes posible después de las elecciones.