Marta Bosquet, C’s, elegida presidente de la Cámara andaluza.
La ultraderecha de Vox será la llave para sacar adelante las tramitaciones de las iniciativas más importantes del recién constituido Parlamento de Andalucía. Dos asientos para PSOE, PP y Ciudadanos, respectivamente, y uno para la formación de Santiago Abascal es la nueva composición de la Mesa de la Cámara andaluza, después de que en la noche del miércoles Adelante Andalucía rechazara uno de los asientos ofrecidos por Ciudadanos.
Finalmente, se impuso el pacto de populares y naranjas con la connivencia de la extrema derecha y el partido de Albert Rivera colocó a Marta Bosquet como la tercera presidente del Parlamento de la región. Lejos de desvincularse del extremismo de derechas, como pretendía Rivera, ha quedado evidente que C’s necesita más a Vox de lo que creían.
Arranca, así, la XI legislatura andaluza, con Bosquet elegida presidente gracias a los votos de la ultraderecha, ya que los 33 diputados del PSOE apoyaron la candidatura de Inmaculada Nieto, de Adelante Andalucía. Los socialistas, por su parte, habían decidido no presentar candidato “para garantizar la pluralidad”. El pacto entre el PP y Ciudadanos, con la connivencia de Abascal, hizo el resto.
También quedó en evidencia la necesidad de los votos de Vox para que los populares sacaran adelante a sus candidatos para los demás puestos de la Mesa del Parlamento. Solo un voto de diferencia puso en la vicepresidencia primera a Esperanza Oña, del PP, frente a los 33 de María Teresa Jiménez Vilches, del PSOE. Julio Díaz, de Ciudadanos, obtuvo 25 y Manuel Gaviria, de Vox, se hizo con la secretaría tercera de la Mesa de la Cámara andaluza, al lograr 29 votos.