Por un supuesto pacto con el grupo de comunicación Bezeq.
A primera hora de ayer, la policía israelí entró en el domicilio de Benjamin Netanyahu, primer ministro de Israel, para proceder a un interrogatorio al mandatario en el marco de la investigación que se está llevando a cabo por un presunto pacto con el grupo de comunicación Bezeq. Supuestamente, éste habría sido beneficiado por las autoridades sionistas a cambio de garantizar una cobertura favorable acerca de los escándalos en los que se ha visto implicado el primer ministro israelí y su esposa Sara.
Esta investigación, el Caso 4000, es una de las tres abiertas contra Netanyahu por supuesta corrupción. En concreto, las pesquisas buscan aclarar las posibles irregularidades cometidas, entre 2014 y 2017, por el dirigente durante su etapa como ministro de Comunicación de Israel y si alcanzó algún acuerdo con el mayor grupo de comunicación del país, cuyo accionistas mayoritario es el empresario Shaul Elovitch, amigo de Netanyahu.
El interrogatorio se orientó, en parte, a contrastar la versión del primer ministro con la que ofreció su antiguo asesor Nir Hefetz. Éste, después de llegar a un acuerdo de colaboración, entregó a la policía mensajes de texto y grabaciones que, supuestamente, revelarían el pacto fraudulento entre las partes. Así, se encontraron mensajes de Sara Netanyahu a Iris Elovitch, esposa de Shaul, en los que pedía un cambio de la línea editorial del grupo.
La policía interroga a Netanyahu
