La llegada de inmigrantes encuentra una Unión Europea insolidaria

Marruecos y los demás países de origen no colaboran.
El Gobierno español ha calificado de “emergencia” la llegada “masiva de embarcaciones con inmigrantes a las costas españolas”, por lo que Pedro Sánchez, presidente del Ejecutivo, ha enviado una carta a Jean-Claude Juncker, su homólogo de la Comisión Europea, en la que pide ayuda adicional para afrontar la situación.
Según fuentes comunitarias, en la misiva se solicita el cumplimiento de lo acordado por los 28 en la cumbre de junio, en la que se comprometieron a apoyar a los países en primera línea, entre los que está España. La Vicepresidencia del Gobierno señala que la ayuda pendiente que se pide con carácter inmediato alcanza los 35 millones de euros.
Casi 24.000 personas llegaron a España cruzando el mar en lo que va de año, según ACNUR. De hecho ya es la vía irregular principal de llegada a Europa. En 2017, alcanzaron nuestras costas casi 22.000 personas, alrededor del 270% más respecto a 2016. Sánchez ha reclamado de la oposición, en especial PP y ciudadanos, “responsabilidad” y “sentido de Estado”.
Para el próximo jueves está convocada por el Ejecutivo la Comisión Delegada para Asuntos Migratorios, que estaba “casi inactiva” con los gobiernos del PP. En esa misma línea, el Gobierno ha responsabilizado a los gabinetes de Mariano Rajoy del caos migratorio y de la falta de medios y recursos para afrontar la avalancha migratoria de las últimas semanas, así como de la falta de colaboración de Marruecos y los países de origen están provocando la gran oleada actual.
Fernando Grande-Marlaska, ministro del Interior, visita en estos días los países de origen de la inmigración para analizar cómo contener este flujo migratorio, mientras Magdalena Valerio, ministra de Trabajo y Migraciones, coordina la asistencia a los inmigrantes desde Chiclana. Por su parte, Carmen Calvo, vicepresidente del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes e Igualdad, ha exigido a PP y Ciudadanos que “actúen con criterios de lealtad y responsabilidad”, ante un problema que es de todos y “no debe ser utilizado como arma electoral”. “El Gobierno no ha podido reaccionar más y en menos tiempo”.
Por otro lado, la Comisión Europea, tan sólo unos días después de que Sánchez solicitara ayuda de la Unión en el Consejo, anunció 25,6 millones de euros con el fin de mejorar la capacidad de recepción de migrantes en España y llevar a cabo más retornos. “España ha visto aumentar las cifras de llegadas durante el último año y necesitamos incrementar nuestro apoyo para ayudarles a gestionarlo y de volver a aquellos que no tienen derecho a quedarse”, señaló Dimitris Avramopoulos, comisario europeo para Migración. España ha recibido 692 millones de euros desde 2014 como ayuda para gestionar los flujos migratorios, según la Comisión Europea.
En estos días se celebra un encuentro promovido por la Organización Internacional de las Migraciones en Ginebra, a la que asistirán altos funcionarios europeos, representantes de los países costeros del Mediterráneo, salvo Libia y Argelia, aunque este último por motivos de agenda, y la Unión Africana. La Unión Europea tratará de convencer a los países representados de las bondades de instalar plataformas de desembarco en terceros países antes de llegar al bloque comunitario.
El principal objetivo, aseguran fuentes europeas, es que los países terceros entiendan que la búsqueda y el rescate son responsabilidad de todos, que se trabaje en futuros acuerdos de colaboración y explicar la propuesta de las plataformas de desembarco de aquellos que han sido rescatados en el Mediterráneo.