La gente de Calviño señala: “Fue el griego, fue el griego”

Christos Staikouras, ministro de Finanzas griego, es el sospechoso de traicionar a Nadia Calviño que no logró los apoyos necesarios para presidir el Eurogrupo. Sin embargo, el político griego ha negado esta circunstancia a EL MUNDO. “Voté por ella las dos veces, hasta el final”.
Staikouras es militante de Nueva Democracia y el Partido Popular Europeo. Aún así, Pedro Sánchez contaba con su apoyo, rompiendo así la disciplina del voto de los ‘populares’ y lograr así diez votos para la Vicepresidenta del Gobierno.
Ayer Calviño trasladó que “Tenía apalabrados al menos 10 votos, pero al final alguno de los ministros no hizo lo que dijo que iba a hacer”. “Estas cosas pasan”, dijo en referencia a la traición de algún país, el cual prefirió quedar bien con el Gobierno de Irlanda.
De todos modos, es imposible saber oficialmente quién falló puesto que la votación fue secreta en una plataforma confidencial. Aunque el principal sospechoso ayer era Staikouras, por la presión que pudiese haber recibido por parte del PPE. El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, se comprometió con Pedro Sánchez para convencer al ministro de Finanzas a votar a Calviño. El argumento era que una presidenta mediterránea era mejor para el país. Tanto Mitsotakis como Staikouras, han trasladado que cumplieron su palabra, a pesar de las presiones de los Ministros del PPE, que apoyaban a Paschal Donohue, ministro de Finanzas de Irlanda, que finalmente ganó.
Por otra parte, Calviño ya contaba con otro gran enemigo. Wopke Hoekstra, ministro de Finanzas de Holanda, el cual siempre ha criticado el incumplimiento del déficit durante los dos primeros años de gobierno de Sánchez. Después de que Pierre Gramegna, candidato del Benelux, se retirara después de la primera votación, Hoekstra apoyó, sin duda alguna, al candidato de Irlanda.
El propio gobierno de Luxemburgo, a pesar de estar encabezado por un socialista, se decantó por el candidato irlandés, al no ser él elegido. Aunque como ya reconoció Calviño, en la votación no solo prima la filiación política sino también los intereses particulares y la cohesión de los países pequeños frente a los grandes países.