La escudería británica ficha al ingeniero de moda.
A James Key le precede su reputación y por eso la escudería inglesa McLaren ha contratado sus servicios. También británico, aterrizó en la Fórmula 1 hace 20 años con tan solo 26 de edad, comenzando en el equipo Jordan. Allí fue ingeniero de pista con Takuma Satō, ingeniero de datos, túnel de viento, etc. hasta que el equipo se reconvirtió en Force India. En 2005 se convirtió en el director técnico más joven de la categoría.
De ahí pasó a Sauber en 2010, con quien consiguió sus mayores éxitos, fabricando grandes coches con motor Ferrari que llevaron a esta escudería a conseguir cuatro podios en 2012 con Sergio Pérez y Kamui Kobayashi conduciendo el C31, el primer coche diseñado por Key. Ferrari pensó en ficharme, pero finalmente optaron por James Allison.
Así pues, el británico tímido e introvertido recaló en Toro Rosso, coincidiendo con Sainz y Verstappen. “Su contrato con Red Bull es a largo plazo”, se lamentaba hace poco Franz Tost, su director deportivo, porque en la escudería diseñó coches muy competitivos con un presupuesto muy limitado. El próximo reto de Key, McLaren.
Key, la llave para salvar McLaren
