Manuel García-Castellón, juez de la Audiencia Nacional, ha denunciado ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) la campaña de desprestigio personal y profesional e intimidación que esta sufriendo en las últimas horas en redes sociales.
Y resalta el juez, que muchos dirigentes, incluidos del “Gobierno de coalición”, repiten y amplifican los mensajes contra su persona.
En un escrito de cuatro páginas, dirigido al presidente del CGPJ, Carlos Lesmes, García Castellón denuncia el inicio de esta campaña, el pasado miércoles, tras enviar al Supremo la exposición razonada para que investigara al líder de Podemos, Pablo Iglesias.
Los presuntos delitos que le achaca García Castellón a Pablo Iglesias son descubrimiento y revelación de secretos, daños informáticos, y denuncia falsa.
Esta información razonada, de la que el Supremo ya ha solicitado informe a la Fiscalía, sometía a consideración del alto tribunal, la investigación del vicepresidente Iglesias y de la vicepresidenta de la Cámara, Gloria Elizo, ambos aforados.
Esta pieza, el caso Dina, indaga el robo del móvil de Dina Bousselham, exasesora de Podemos, en 2015, y el posterior uso de los datos de su tarjeta SIM. Varios de esos archivos aparecieron en el domicilio del ex comisario, José Manuel Villarejo, ya jubilado y en prisión preventiva por este y otros delitos.
“Deslegitimar al Poder Judicial”, denuncia el juez de la Audiencia Nacional
En su escrito, el juez de la Audiencia Nacional explica que la campaña pretende “restar credibilidad a su exposición razonada”. Asimismo, “deslegitimar al Poder Judicial”. También, que le acusan de llevar a cabo una estrategia política para “debilitar a una organización política”.
García-Castellón, en su descargo, esgrime que en sus 42 años de ejercicio profesional, ha investigado casos que afectan a “buena parte de los partidos políticos”. Con decisiones de “distinto signo”. En ninguno de esos casos, señala, se ha producido una “reacción equiparable” a la del momento.
En el escrito se incluyen una serie de mensajes publicados contra su persona y que han motivado la denuncia ante el CGPJ. Algunos de ellos le tachan de “facha”, “prevaricador, corrupto o mafioso”. Y en otros se le acusa de haber sido sobornado por el líder del Partido Popular.