Pocas horas después de la dimisión de Édouard Philippe como primer ministro de Francia, Emmanuel Macron, presidente francés, ha nombrado para el cargo al también conservador, Jean Castex, alcalde de Prades, en la Cataluña francesa.
Todo el Gobierno de Philippe acompañó al ex primer ministro y presentó también su dimisión. De este modo, se facilita que Castex remodele el Ejecutivo, después de la debacle de La República En Marcha en las elecciones municipales del domingo.
Con 55 años y miembro del partido conservador Los Republicanos, el nuevo primer ministro francés es alcalde de Prades, en el sur de Francia. Apenas conocido, a nivel nacional ha sido el artífice de la desescalada en el vecino del norte por encargo de Philippe. Eso le ha valido el apodo de ‘Monsieur Déconfinement’.
A pesar de no tener notoriedad internacional, sí lo es en la política francesa, en especial en la derecha. Fue secretario general adjunto del Elíseo entre 2011 y 2012, siendo presidente de la república, Nicolás Sarkozy. En 2017 fue designado delegado interministerial para los Juegos Olímpicos de París en 2024.
Castex tiene gran experiencia política en las altas esferas parisinas
Se trata de un alto funcionario alumno de la Escuela Nacional de Administración, con una gran experiencia política en las altas esferas parisinas. Que Macron haya elegido a Castex como primer ministro demuestra que el presidente confía en esta nueva etapa de la política francesa.
El 59% de los ciudadanos en una encuesta publicada esta semana por Franceinfo y Le Figaro prefería que Philippe pilotara el cambio político que tres de cada cuatro franceses exigían a Macron. Sin embargo, el presidente ha optado por inyectar savia nueva cara a su apuesta por cuestiones relativas al medio ambiente para sus próximos dos años de mandato.
De hecho, la gran vencedora de los comicios locales fue la coalición Europa-Ecología-Los Verdes y Macron ha tomado buena nota de ello.