La remodelación del Gobierno que este sábado materializó Pedro Sánchez llevaba implícito un secreto a voces: la salida de Iván Redondo. El que ha sido principal asesor del jefe del Ejecutivo durante tres años deja su cargo al frente del Gabinete de Presidencia de Sánchez.
De todos en el seno del Gobierno era conocido que Iván Redondo había ido ganando poder, algo que confrontaba directamente con Carmen Calvo, la vicepresidente primera.
Ella también ha quedado fuera de un revolucionado, más que remodelado, Ejecutivo. Un equipo de Gobierno que, dijo Sánchez, será el de la recuperación económica y cuya media de edad ha bajado a 50 años.
Por otro lado, también se sabía que Iván Redondo ya quiso dejar la dirección del Gabinete de Presidencia tras las elecciones del 10-N.
Sin embargo, la llegada de la epidemia de coronavirus, el estado de alarma, la Gran Reclusión y los posteriores acontecimientos truncaron sus planes. Había que esperar.
Lo cierto y verdad es que, a fin de cuentas, y tras los fiascos en Murcia y en las elecciones de Madrid, el visor del fusil estaba puesto en Redondo. El ya ex asesor se tiró por un barranco por Sánchez, pero ahora, es el presidente quien lo lanzó por él.
Sabe que tiene que recuperar la plena confianza del aparato del partido, cuestionada, cuanto menos, y para eso tiene hasta el congreso de otoño. Redondo era un contratiempo si seguía dentro.
En un mensaje enviado a Europa Press, Iván Redondo señala que “a veces en la política, en la empresa, como en la vida, además de saber ganar, saber perder, hay que hacer algo mucho más importante: Saber parar”.
Lo sustituirá como jefe de gabinete Óscar López, un ex dirigente socialista, mientras que el Ministerio de Presidencia lo pilotará Félix Bolaños.
Con la revolución que ha materializado el presidente del Gobierno, cambia más del 40% de los ministros socialistas. Así, al dejar el Ejecutivo Calvo, Nadia Calviño, ministra de Asuntos Económicos, pasa de la vicepresidencia segunda a la primera. Un claro signo del talante que Sánchez quiere imprimir a su nuevo Consejo de Ministros.
Yolanda Díaz, titular de Trabajo, pasa de la vicepresidencia tercera a la segunda, y Teresa Ribera, ministra de Transición Ecológica, de la cuarta a la tercera.
Sí ha sorprendido a casi todos, la marcha de José Luis Ábalos, que deja todos sus actuales cargos, en el Gobierno y en el partido. Además, el presidente ha incorporado al Ejecutivo más mujeres, tres de ellas muy vinculadas al municipalismo.
Se trata de escenificar el papel relevante que protagonizarán los ayuntamientos de toda España en la recuperación. Serán los municipios quienes gestionen más directamente los fondos europeos.