La Organización para la Energía Atómica de Irán (OEIA) ha confirmado que puede enriquecer uranio al 20 por ciento en sus instalaciones en Fordo. En la práctica, esto supone que está preparado para fabricar bombas nucleares.
Behruz Kamalvandi, portavoz de la OEIA, explicó que el proceso se completó en doce horas. “En 2010 produjimos combustible al 20 por ciento y esta capacidad no es algo nuevo”, subrayó.
Según manifestó, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AEIA, por sus siglas en inglés) está al corriente los pasos dados en este proceso. “Tenemos la capacidad de enriquecer fácilmente por encima del 20% y en estos momentos es una posibilidad que estamos explorando”, señaló.
Así, de acuerdo con lo dicho por el portavoz de la organización iraní, se contactó con la AEIA la semana pasada. Posteriormente, “se escribió otra carta para informar a la agencia de que llevaríamos a cabo esta acción”.
Kamalvandi matizó que “el proceso empezó el domingo con la presencia de dos inspectores de la AEIA”.
Por su lado, Mohamad Yavad Zarif, ministro de Exteriores de Irán, ha apuntado que el proceso es “totalmente reversible”. Insistió, a través de su cuenta en Twitter, que reiniciaron el enriquecimiento “tal y como legisló nuestro Parlamento. La AEIA ha sido debidamente notificada”.
A eso añadió que la acción iraní “cumple totalmente el párrafo 36 del acuerdo nuclear, tras años de incumplimientos por parte de otros participantes. Nuestras medidas son totalmente reversibles cuando todos cumplan totalmente”.
Irán viola el acuerdo nuclear
Por su parte, Alí Rabiei, portavoz del Gobierno iraní, reveló este lunes que habían dado comienzo los procedimientos para enriquecer uranio al 20%. Esto supone la violación del acuerdo nuclear firmado en 2015, pero Hasán Rohani, presidente del país, firmó una orden para iniciar el proceso.
Irán reanudó su programa nuclear tras la salida de Estados Unidos del acuerdo suscrito en 2015 por el régimen de los ayatolás y otras siete potencias.
Tras la orden dada por Rohani y una vez legislada el proceso de enriquecimiento de uranio por el Parlamento iraní, el propio presidente admitió que la ley “no es inteligente”. Podría dañar las relaciones con la AEIA y obstaculizar unas posibles negociaciones con Estados Unidos tras la victoria de Joe Biden.