El alto nivel de inflación que se está registrando es un fenómeno global, como apuntan desde el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital.
De hecho, la tasa de inflación interanual de la zona euro se ha situado en julio en el 8,9%. Son tres décimas más que la registrada en junio, cuando marcó un 8,6%.
Vuelve a ser, por tanto, el mayor encarecimiento de los precios en la eurozona de toda la serie histórica, según datos avanzados de Eurostat.
Asimismo, es cuatro veces más del objetivo de estabilidad de precios del 2% del Banco Central Europeo (BCE), presionando más a la autoridad monetaria.
Pese a que el incremento interanual del precio la energía se ha desacelerado al 39,7%, los precios en la zona euro han seguido subiendo.
Además, el precio de los alimentos frescos también bajó dos décimas en el séptimo mes del año, hasta el 11%, desde el 11,2% de junio.
En cambio, se han encarecido los servicios, concretamente, un 3,7%, es decir, tres décimas más que en el mes anterior.
Sin embargo, los precios de los bienes industriales no energéticos se incrementaron un 4,5%, mientras que en junio lo hicieron en un 4,3%.
Por otro lado, al margen del impacto de la energía, la inflación de la zona euro, en tasa interanual, se situó en el 5,4% en julio. Es decir, cinco décimas más que en el mes anterior.
La inflación subyacente de la eurozona sube hasta el 4%
Si se excluye también el efecto de los precios de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la inflación subyacente escala hasta el 4%. Son tres décimas más que en el sexto mes del año.
Por otra parte, diez de los países de la eurozona han registrado aumentos de precio de doble dígito.
Así, las cifras más altas se dieron en Estonia (22,7%), Letonia (21%) y Lituania (20,8%). Las otras siete economías de la eurozona con inflación de doble dígito son: Eslovaquia (12,8%); Eslovenia (11,7%); Países Bajos (11,6%); Grecia (11,5%); España (10,8%); Chipre (10,6%); y Bélgica (10,4%).
Al lado contrario, donde menos intensas han sido las subidas fue en Malta (6,5%), además de Francia (6,8%) y de Finlandia (7,9%).
En cuanto al diferencial de precios respecto de la media de la eurozona en España se ha elevado al 1,9%. Esto es porque la tasa de inflación armonizada se situó en julio en el 10,8%, mientras que en junio fue del 10%.
Precisamente, para contener la tendencia alcista de la inflación, el Consejo de Gobierno del BCE subió los tipos de interés en 50 puntos básicos.