A partir del 9 de noviembre, la restricción de movilidad nocturna, el toque de queda, se suspende y serán los gobiernos regionales quienes decidirán. El Consejo de Ministros de ayer pidió al Congreso una prórroga del estado de alarma para los siguientes seis meses desde que acaben estos primeros 15 días.
Sin embargo, en el texto del decreto se suprime lo relativo al toque de queda y deja en manos de las Autonomías que decidan su aplicación. Así lo confirmó María Jesús Montero, ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Gabinete de los martes.
Los artículos 9 y 10 del decreto del estado de alarma establecen esta restricción de movilidad nocturna entre las 23:00 y las 6:00 horas. Ahora, en el texto que ha presentado al Congreso para su aval, queda a criterio de cada “autoridad competente delegada”.
Es decir, serán los presidentes regionales quienes adoptarán las medidas en este sentido en cada uno de sus territorios.
Con todo, según manifestó la portavoz del Ejecutivo de Pedro Sánchez, se sigue dando “amparo constitucional” a las medidas que vaya aplicando cada autonomía. “Siempre en función de datos epidemiológicos” para superar la segunda oleada de la epidemia.
Tras admitir que los ciudadanos están cansados, trasladó que resulta “imprescindible” el cumplimiento de las recomendaciones de las autoridades sanitarias.
El pasado 25 de octubre se decretó, por cuarta vez en democracia, el estado de alarma, que incluía el toque de queda entre las 23:00 y las 6:00 cada día. Los Gobiernos regionales podrían variar la franja horaria de la restricción una hora adelante o hacia atrás.
Madrid, por ejemplo, que ya había impuesto una suerte de toque de queda entre las 00:00 y las 6:00, podría, así, mantener su pretensión. Otras autonomías, en cambio, han optado por adelantar y las calles deben quedar vacías a las 22:00.
Con el paso dado ahora por el Ejecutivo central, son los presidentes autonómicos quienes asumen totalmente la imposición o supresión de la medida. También el modelo y las franjas horarias.