El acuerdo con ERC sobre la Ley Audiovisual asegura que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2022 salgan adelante sin problema alguno. Sin problema, al menos en cuanto al número de votos en el Senado.
Un acuerdo que, según Héctor Gómez, portavoz del grupo parlamentario socialista, se ajusta a la directiva europea. Además, afirma que se puede financiar con los actuales Presupuestos, por lo que no será necesario añadir una enmienda y, por tanto, que vuelvan a pasar por el Congreso.
La polémica venía porque el Gobierno advirtió a los republicanos catalanes que las cuotas y porcentajes preacordadas no podían aplicarse a HBO o Netflix.
Según el Ejecutivo, son plataformas con sede en el extranjero. Ante eso, desde ERC pretendían que el Gobierno cogiera una barita mágica y encandilara a ambas plataformas o dejarían de respirar hasta enfermar.
Vamos, que tratarían de tumbar los Presupuestos en el Senado y luego en el Congreso, si a las Cuentas se le añadían enmiendas.
Pues bien. El nuevo proceso negociador ha concluido con un acuerdo que garantiza luz verde a los PGE y, de paso, prácticamente, la Legislatura.
Asimismo, tampoco será preciso que el gasto del fondo de doblaje y subtitulado que se creará se incorpore mediante una enmienda. Se evita, de nuevo, así, que el proyecto de los PGE vuelva a la Cámara Baja.
Así, a falta de conocerse más detalles, el acuerdo no es solo cuotas o espacios de promoción de las lenguas cooficiales. Se pretende, además, convertir a España en un referente de la creación audiovisual. Eso explicó Gómez.
Entre las medidas que recoge el pacto, figura un mínimo del 15% de la producción de la TV lineal pública en catalán, euskera o gallego.
No obstante, Gómez no fue capaz de responder con precisión a si este aspecto afecta sólo a RTVE o si lo hace también a las cadenas autonómicas.
En ese sentido, el portavoz socialista se ha limitado a afirmar que una de las funciones constitucionales de RTVE es promocionar las lenguas cooficiales. “Algo que se va a hacer”, zanjó.