Después de que se ha conocido que la actriz Ana Obregón ha sido madre de una niña por gestación subrogada en Miami, los socios del gobierno de coalición han vuelto a manifestarse en contra de esta práctica.
Así, María Jesús Montero, vicesecretaria general del PSOE y ministra de Hacienda, ha señalado que su formación “no” está a favor de la gestación subrogada.
Los socialistas consideran esta práctica como “una forma más de explotación del cuerpo de la mujer”, explicó en unas declaraciones en los pasillos del Congreso. No obstante, reconoció que hay que evaluar “cada caso concreto”.
Cabe recordar que en España, los ‘vientres de alquiler’ están prohibidos. Ahora bien, nada impide que esa práctica se realice fuera de nuestro país, aunque el niño o la niña vayan a residir en España.
En ese sentido, Montero recuerda que al principio de la legislatura se hicieron “cambios administrativos”.
Son los relacionados “con la inscripción en el registro para evitar que se produjeran este tipo de situaciones”, apuntó.
Dicho esto, la ministra matizó que “cada caso concreto hay que analizarlo de forma concreta”. No se puede “pronunciar en genérico”, zanjó.
Por su lado, Lilith Verstrynge, secretaria de Organización de Podemos y secretaria de Estado de Agenda 2030, se decanta por reabrir el debate sobre ello.
Aboga por impedir que la gestación subrogada se pueda continuar realizando a través de terceros países.
A su juicio, “es una buena noticia” que en España estén prohibidas estas prácticas. Sin embargo, no es suficiente y “aún hay pasos que dar para que no se pueda hacer a través de segundos y terceros países”.
En ese sentido, recordó que la nueva Ley del Aborto declara la gestación subrogada “violencia reproductiva” contra la mujer.
Asimismo, Verstrynge pide “empatía” con las familias que no pueden tener hijos de manera biológica.
No obstante, también “con las mujeres que están al otro lado de la gestación subrogada y que son las que ponen su vientre a disposición de otras personas, en muchas ocasiones más adineradas”.