GameStop: cuando las hormigas ganan a los elefantes

GameStop: cuando las hormigas ganan a los elefantes

El modo como GameStop, una cadena de videojuegos con 37 años de antigüedad, se ha salvado plantea dudas acerca de su legalidad. Pongámonos en antecedentes.

En abril, la cadena de videojuegos anunció el cierre de 450 tiendas debido a las enormes pérdidas producidas por la migración masiva a internet de las ventas a causa de la epidemia de coronavirus.

Entonces, GameStop cotizaba a unos 3 dólares. Cinco meses después, Ryan Cohen, fundador de Chew, una tienda on-line de comida para mascotas compró el 13% la compañía. Forzó a que la cadena de videojuegos se lanzará en internet a rivalizar con Amazon.

Entonces, los inversores de Wall Street decidieron apostar contra GameStop y empezaron a vender en corto sus acciones. Ya cotizaban a cerca de 10 dólares.

Sin embargo, nadie esperaba que, de manera coordinada, los foreros que querían salvar a la cadena de videojuegos unieron sus fuerzas en Reddit. Empezaron a comprar títulos de la compañía y también empezaron a ganar mucho dinero con ese rescate.

Los inversores que apostaron en corto contra GameStop sufrieron serias pérdidas. Y es que había pocas posibilidades de que las acciones de la compañía de videojuegos resurgieran. Pero la inversión masiva de los pequeños inversores supuso que la cadena reflotara.

Ambos grupos, los que fueron contra la empresa como los foreros, tenían un objetivo común, aunque no la misma motivación: ganar dinero. La diferencia es que los inversores que apostaron contra GameStop actuaron dentro de la legalidad. En cambio, los pequeños inversores se coordinaron, algo prohibido para las instituciones. Pero… ¿para los particulares?

El caso de esta cadena de videojuegos ha hecho saltar todas las alarmas y la Comisión del Mercado de Valores estadounidense es consciente del riesgo. De ahí que advierta de que estará vigilante sobre la actual volatilidad.

Con todo, hay expertos que avisan de que, si se pretende repetir más veces algo como lo sucedido, intentar impedirlo es poner puertas al campo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *